La mesa de contratación ha desestimado las alegaciones presentadas por los colegios de arquitectos de Madrid y Extremadura contra el concurso para la contratación del plan de fortificaciones de la ciudad de Badajoz, al que han concurrido únicamente dos propuestas: la de la Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por los arquitectos Carmen Cienfuegos Bueno y José Javier Arbues Gabarre y la del arquitecto Daniel Jiménez Ferreira. Los técnicos municipales ya las están evaluando al cumplir ambas con los requisitos, según informó ayer la portavoz del equipo de gobierno, María José Solana. La semana que viene se reunirá de nuevo la mesa y es probable que la siguiente sea cuando adjudique esta actuación, incluida en el Proyecto Baluartes y con un presupuesto de 93.000 euros.

Los colegios de arquitectos solicitaban la suspensión del procedimiento al considerar que tanto la urgencia de la convocatoria (se sacó a concurso el 19 de marzo y el plazo limite de presentación de ofertas era el 26 de ese mes) como la garantía provisional establecida (del 2%) limitaban la libre concurrencia de los licitadores. Sin embargo, sus argumentos no han sido atendidos, ya que, según la mesa de contratación, no desvirtúan la convocatoria.

En este sentido, la portavoz municipal explicó que se ha estimado que tanto el carácter urgente como la fianza están justificados. La primera porque hay un informe que establece la necesidad de acelerar el proceso de licitación y ejecución de este servicio por los plazos que impone el Programa Operativo de Cooperación Transfronteriza España Portugal (Poctep) de la Unión Europea que financia al 75% de los trabajos y fija como fecha tope para su conclusión el 31 de junio. Solana apuntó que los propios colegios profesionales reconocen en sus escritos que, a pesar de ser un plazo exiguo, se ajusta a la "legalidad".

Con respecto a la fianza del 2% impuesta a los licitadores (1.500 euros), explicó que tiene como fin que estos últimos cumplan las obligaciones contraídas al presentar la oferta hasta que se formalice el contrato, por el perjuicio que podría causar la renuncia a una adjudicación provisional, que retrasaría el procedimiento.

"Los plazos son austeros, pero es que tenemos poco tiempo", dijo la portavoz municipal. En este sentido, explicó que la elaboración del plan de fortificaciones no se ha podido licitar antes porque ha habido que esperar a que concluyera el Plan de Arquitectura Defensiva nacional del Ministerio de Cultura, aprobado en octubre del 2012, para atender a las directrices que este último establecía, lo que unido a la fecha límite determinada por Europa hace que "juguemos con plazos muy ajustados".

Ante estas circunstancias, el ayuntamiento se acogió a la figura legal que, según la Ley de Contratos del Sector Público, permite "singularidades" en pliegos de condiciones de estas características, como la de la urgencia, dada la "importancia vital" de este proyecto para la ciudad.

La trascendencia del Proyecto Baluartes para Badajoz y todas las actuaciones que engloba es lo que pidió la portavoz municipal que tenga en cuenta el PSOE, después de que el concejal Pedro Miranda, declarara que la adjudicación estaba "prácticamente dirigida" a la vista de los requisitos exigidos. Solana reprochó ayer a Miranda que frente al consenso y disposición que ella personalmente le ofreció, la respuesta sea este tipo de manifestaciones. La portavoz añadió que considera y reconoce el trabajo de fiscalización de la oposición, pero aseguró que no está dispuesta a admitir "ni injurias ni calumnias".