La Policía Nacional detuvo el jueves a una mujer de 25 años, empleada del hogar, como presunta autora de un delito de hurto continuado por sustraer joyas valoradas en más de 3.000 euros en el domicilio en el que trabajaba. Los hechos fueron puestos en conocimiento de la oficina de denuncias de la Comisaría Provincial el pasado 1 de enero, cuando la víctima narró como se había percatado de la falta de un número elevado de joyas de su domicilio sin que se observaran signos de forzado. La investigación se centró en las empleadas del hogar que habían trabajado en el domicilio en un periodo de tiempo de más de un año. De esta forma se identificó a la presunta responsable, que sustraía poco a poco las joyas para venderlas posteriormente en casas de compra-venta.