Funcionarios del Cuerpo nacional de Policía de Badajoz detuvieron el pasado día 11 de marzo, en la capital pacense, a un hombre de 43 años, de nacionalidad marroquí y con antecedentes, tras ser interceptado cuando viajaba portando 219 óvulos de hachís adheridos a su cuerpo, mediante una cinta adhesiva, según los datos facilitados por la Jefatura Superior de Policía.

Los agentes interceptaron el turismo en el que viajaba acompañado por un hijo menor de edad, la noche del pasado lunes, cuando regresaba de un viaje a la ciudad de Tánger, en Marruecos.

Los hechos, según las citadas fuentes, ocurrieron durante el desarrollo de un dispositivo especial en el marco de la lucha contra el tráfico de sustancias estupefacientes. Estos ocurrieron en el control montado en el acceso a la ciudad por la carretera de Sevilla, la N-432.

ACTITUD ESQUIVA / fue al identificar a un conductor cuando éste mostró una actitud esquiva y nerviosa, según el comunicado de la policía. Y los agentes comprobaron que el conductor llevaba adherido a su cuerpo los citados óvulos de hachís, como reconoció él mismo cuando los policías efectuaron el oportuno cacheo superficial de su cuerpo.

El hombre, siempre según el relato policial, regresaba de un viaje a Tánger, fue llevado a dependencias policiales, mientras que su hijo fue trasladado al Centro de Menores San Juan Bautista hasta la llegada de su madre, que se encontraba en Málaga.

El ahora detenido llevaba las bellotas de droga adheridas a su pierna, desde la cadera a los tobillos, y portaba además 1.500 euros en billetes. El hombre pasó a disposición judicial por un presunto delito de tráfico de drogas.