La policía local detuvo el domingo por la tarde a un conductor de 50 años que circulaba ebrio, en sentido contrario y a gran velocidad por la avenida José María Alcaraz y Alenda. El hombre, que multiplicó por tres la tasa de alcoholemia permitida al volante, puso en "grave" riesgo a los conductores con los que se cruzó y estuvo a punto de colisionar con un turismo en el que viajaban dos agentes fuera de servicio, que lograron interceptarlo. El suceso tuvo lugar sobre las 20.15 horas y el conductor fue detenido, al no tener domicilio en España, y trasladado a los calabozos de la Policía Nacional a la espera de ser puesto a disposición de la autoridad judicial.

Según informó ayer la policía local, en una semana se ha imputado a 15 conductores por delitos contra la seguridad vial, cinco de ellos este pasado fin de semana. La mayoría dieron positivo en las pruebas de alcoholemia, dos de ellos en consumo de drogas y otros dos circulaban sin permiso de conducir. Se enfrentan a sanciones de entre 500 y 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos del carné. Este es el resultado de los controles preventivos que lleva a cabo la policía local, que continuarán realizándose "para erradicar las conductas incívicas al volante y salvaguardar a personas inocentes víctimas de accidentes".