La Policía Nacional detuvo el pasado día 19 al ciudadano portugués P. A. C. R., empresario de la construcción, acusado de un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, por emplear y contratar a ciudadanos brasileños para trabajar en sus obras, con la falsa promesa de conseguirles papeles y de legalizar su situación en España, sin que después cumpliera lo pactado.

Según fuentes policiales, el detenido no pagó a los trabajadores por el trabajo realizado y los amenazó con denunciar su situación irregular si emprendían acciones legales contra él.

LA DENUNCIA No obstante, éstos presentaron una denuncia, en la que detallaban que fueron contratados como peones por un sueldo de mil euros mensuales, que después de cinco meses no llegaron a cobrar, como tampoco se formalizaron sus contratos ante la Seguridad Social.

Miembros del Grupo Operativo de Extranjeros, tras recibir la denuncia, lograron identificar y detener al presunto autor de los hechos citados.

Este delito, en caso de emplear a ciudadanos extranjeros sin permiso de trabajo y en condiciones que supriman o restrinjan los derechos que tuvieran reconocidos, está castigado con penas que van de 6 a 12 meses de prisión, según la policía.