La Policía Nacional de Badajoz detiene a un hombre de 42 años acusado de agredir brutalmente a otros de 36, que se encuentra ingresado desde hace unos días en el Hospital Infanta Cristina con una herida en la cabeza y en estado crítico.Según informa la agencia Europa Press, las lesiones que presentaba este hombre tenían su origen en una agresión ocurrida en la calle Sisones y en la que pudieron intervenir no menos de tres personas. Uno de los acusados es el detenido y al que le constan 23 detenciones anteriores, ha sido puesto a disposición judicial, habiéndose decretado su ingreso en prisión. Las investigaciones determinan que la calle Sisones fue el lugar donde se produjo la brutal agresión con un objeto contundente, en concreto el portal de una vivienda que funciona como punto de venta de sustancias estupefacientes. Por este motivo, los agentes consideran que "en principio", la agresión "se puede relacionar con la venta y distribución de dichas sustancias". En el transcurso de la investigación también se ha detenido por su presunta relación a I.G.V., de 33 años y con cuatro detenciones, quien ingresó días después de este suceso en el Hospital Infanta Cristina días después de este hecho, con un impacto por disparo de arma de fuego en los genitales, ocurrido en la localidad de Olivenza, investigaciones que desarrolla la Guardia Civil. Además se ha arrestado a una mujer M.G.M., de 33 años y con 10 detenciones, acompañante del anterior en el momento del ingreso hospitalario, por estar en posesión de sustancias estupefacientes, en concreto 41 "papelinas" de cocaína y 27 de heroína. En las actuaciones policiales ha sido necesario efectuar registros domiciliarios en dos viviendas de la calle Sisones, de la barriada del Cerro de Reyes de Badajoz, interviniéndose numerosos efectos tanto para la manipulación de droga, como sobres con sustancias estupefacientes (320 dosis de cocaína y 240 de heroína), además de navajas, palos, catanas, dos teléfonos móviles, televisores de plasma, más de 2.000 euros en metálico y otros objetos. Las viviendas contaban en sus puertas de acceso con microcámaras conectadas a circuitos cerrados de televisión, con el objeto de poner en alerta a los moradores de quiénes pretendían acceder al interior, incluso antes de aproximarse a ellas. En una de las viviendas registradas fueron sorprendidas seis personas, consumidores de sustancias estupefacientes, en clara actitud de encontrarse allí con intenciones de comprar o consumir sustancias, por lo que podría considerarse el lugar como "fumadero" de cocaína y heroína.