La Policía Nacional ha detenido a un hombre como presunto autor de un delito de falsificación de moneda por introducir en el Casino de Badajoz billetes falsos de 50 euros, con una calidad muy buena en la impresión, delito por el que ha ingresado en prisión.

La investigación, llevada a cabo por la Brigada de Investigación del Banco de España y la Policía Judiciaria portuguesa, se inició en mayo de 2012, al detectarse 24 billetes falsos de 50 euros en el Casino pacense, como explica la Policía Nacional.

Los billetes habían sido introducidos en la ruleta americana, y fueron detectados por una de las "crupieres". Tras producirse la denuncia, los agentes de policía comprobaron que los billetes eran de "nuevo cuño".

Representaban una "potencial" amenaza para la "normal" circulación monetaria de España y sus países vecinos, no por el número de piezas detectadas, sino por sus características de impresión.

Esta impresión estaba realizada con la misma técnica que los originales, lo cual confería a los billetes una calidad "muy buena" y hacía "fácil" confundirlos con los legítimos; además, se detectó que se podían confeccionar un "elevadísimo" número en un corto período de tiempo.

Tras varios meses de investigación, cuyas pesquisas llevaron a Portugal, se pudo llegar hasta una de las personas que se encargaba de introducir los billetes falsos en el mercado lícito, un ciudadano residente en Badajoz de nacionalidad portuguesa.

Una vez identificado, fue localizado el pasado sábado en el propio Casino de Badajoz, donde se procedió a su detención como presunto autor de un delito de falsificación de moneda, siendo trasladado hasta dependencias policiales.

Una vez en éstas, se realizó un registro exhaustivo de su vehículo, pudiendo comprobar que el número de bastidor aparecía "semi borrado" y que la documentación del coche era "presuntamente" falsa.

La documentación del titular no coincidía con la que figuraba en la Base de Datos de la Dirección General de Tráfico y la ficha de Inspección Técnica del vehículo estaba falsificada -el número de matrícula no aparecía troquelado en la documentación-.

Por este motivo, se procedió a imputar al detenido -de 60 años, sin antecedentes penales- por un delito de falsificación documental.