Era un hombre normal, de estatura media, delgado, que pagó por adelantado y en efectivo". Así describió Pilar Montero, empleada de la empresa Albarrán de alquiler de coches sin conductor, de Badajoz, a G. L. R. M., de 51 años y natural de Gijón, a quien detuvo la policía a la una de la tarde del pasado 27 de marzo, cuando caminaba por la calle cerca de su domicilio en el barrio pacense de Pardaleras, acusado de haber vendido nueve turismos que previamente había alquilado en agencias de varias ciudades, entre ellas Badajoz.

Así, el presunto estafador se hizo con un Ford Focus que alquiló en Sevilla y vendió en Murcia; un Opel Vivaro, alquilado en Toledo y vendido en Albacete; otro Focus, alquilado en Albacete y vendido en Sevilla; un Volkswagen Caddy que sacó en Don Benito y se encontró en Salamanca; un Ford Transit que cogió en Murcia y vendió en Albacete, un Renault Megane que alquiló en Badajoz y vendió en Murcia; además de un Opel Zafira, Mercedes Seria A, o un Opel Meriva, hallados o vendidos en Alicante.

MODUS OPERANDI El detenido alquilaba un coche de gama media a nombre de una empresa supuesta y figurando él como conductor. Posteriormente anunciaba la venta del vehículo en varias páginas web en internet, indicando un número de teléfono como contacto. Lo habitual era que aparecieran los datos técnicos del turismo en cuestión en los anuncios, evitando dar el número de matrícula con el objetivo de evitar que pudiera ser reconocido o identificado como un vehículo de alquiler.

Asimismo, G. L. R. M., realizaba los contactos para la venta con los posibles compradores siempre en ciudades distintas a la que se encontraba la agencia donde había alquilado el vehículo, y siempre durante los fines de semana, porque de este modo intentaba evitar que se llevaran a cabo posibles comprobaciones de los datos del vehículos en las oficinas de las delegaciones de Tráfico de esas ciudades, según los datos facilitados por la Jefatura Superior de Policía.

FOTOCOPIAS Cuando utilizaba las documentaciones de los turismos, la ficha técnica, o el permiso de circulación, que cuando se trata de vehículos de alquiler suelen ser fotocopias compulsadas y plastificadas de los originales, las fotocopiaba él a su vez y las manipulaba diciéndole al comprador que los originales se hallaban depositados en una gestoría, de la que daba nombre, dirección, ciudad y todo tipo de detalles, pues éstas existían en realidad.

Cuando los compradores acudían a las gestorías para interesarse por la documentación original, les informaban de que no existían en sus oficinas. Para entonces el vendedor había desaparecido sin posibilidad de contactar con él.

Las víctimas del engaño acudían a denunciar los hechos, cometidos en el transcurso de unos dos meses hasta la detención del presunto autor, y se encontraban con que ya había sido denunciado el robo por las empresa de alquiler como apropiación indebida. El estafador vendía los coches a precios de entre 6.000 y 7.000 euros, y exigía el dinero en efectivo poniendo como excusa la urgencia de algún viaje imprevisto o algún asunto urgente, por lo que, según la policía, ha podido conseguir unos 60.000 euros.

Una vez que el acusado supo que le buscaban por estafa, evitó alojarse en establecimientos de hostelería, por lo que mantenía algún domicilio alquilado. En Badajoz tenía uno en Pardaleras, que fue registrado por la policía, y otro en Las Vaguadas.

Paloma Montero, empleada de la empresa Albarrán, afirmó a este diario que el ahora detenido no llamaba la atención ni levantaba sospechas, "tenía una apariencia normal", dijo. Y recordó que había llamado por teléfono para preguntar el precio del alquiler de un coche para una semana, "le pareció bien y vino a firmar el contrato; pagó en efectivo y por adelantado el alquiler y la fianza, y no volvió".

LLAMADA POLICIAL La empresa, después de dos meses llamándole por teléfono al número que había dejado y no obtener respuesta, denunció el caso a finales de marzo. "La policía llamó el lunes para decirnos que lo habían detenido y que había vendido el coche en Murcia", explicó. Ahora esperan recuperarlo. Juan Albarrán, propietario de la empresa, que ya está retirado, recordó que a principios de año "nos avisaron de que había aparecido en Francia otro coche que nos robaron hace un par de años y tuvimos que ir a por él".

El detenido tiene reclamaciones en 8 juzgados (dos de Málaga, dos de Murcia, Sevilla, Getafe, Almuñécar y Fuengirola) y siete comisarías (Madrid, Murcia, Alcalá de Guadaira, Don benito, Gandía y la Guardia Civil de Alcantarilla, Murcia).