Las dos personas detenidas por la Policía Nacional el pasado día 3 por su presunta implicación en la muerte de Jaime López de Ceballos Peña, de 78 años, a consecuencia de las puñaladas que recibió en su domicilio de la avenida de Colón, son vecinos de Badajoz y tenían relación con la víctima, aunque no familiar.

Se trata de una mujer, D.I.V.A., de 31 años, y un hombre, A.S.J., de 41, ambos con antecedentes policiales y penales, que desde la pasada semana se encuentran en prisión incondicional sin fianza por orden de la titular del juzgado de instrucción número 4 de Badajoz.

Aunque el móvil que llevó a los detenidos a causar la muerte del anciano el pasado 20 de enero fue económico, según el jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía, Angel Galán, éste aseguró ayer que los autores "inicialmente no fueron a robar". De hecho, los investigadores aún no tienen claro si estos se llevaron dinero o no, lo que sí saben es que ni abrieron la caja fuerte ni se llevaron ningún objeto de valor de la vivienda de la víctima.

Estos han sido algunos de los datos que Galán, junto con la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, facilitaron ayer del resultado de la investigación que lleva a cabo la Brigada de la Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Badajoz, un trabajo que ha resultado "bastante complicado".

Los agentes centraron su investigación a partir de dos datos que el anciano reveló, antes de fallecer, a la doctora que lo atendía en el lugar: que le habían atacado un hombre y una mujer y que los conocía.

Desde ese momento, la policía tuvo que esclarecer qué relación podían tener, aunque no han querido desvelarla a los medios de comunicación. Sí aseguró Galán que ni la mujer tenía que ver con el servicio doméstico de la víctima, como trascendió tras las detenciones, ni pertenecen a la familia del fallecido.

"Es falso que sea ninguna de las señoras de la limpieza que ha trabajado en la casa, ninguno de los dos han trabajado en la casa, pero tienen relación con él", señaló.

Según el relato del jefe superior de la Policía Nacional, atacaron a la víctima en el interior de su domicilio, donde vivía solo. "Llamaron y les abrió porque les conocía, porque no abría a gente que no conocía y echaba la llave por dentro". Una vez que le acuchillaron y se marcharon, el anciano salió fuera de su casa a pedir auxilio. "Sólo habló con la doctora que intentaba taponar la herida".

Desde que recibió la primera puñalada mortal en el cuello hasta que falleció transcurrieron quince minutos. El anciano estaba siendo tratado con Sintrom, lo que aceleró la hemorragia.

La policía, que aún no ha localizado el arma blanca utilizada, no descarta nuevas detenciones. Aunque los autores materiales del homicidio fueron presuntamente los dos detenidos --que tienen relación entre sí pero no son pareja--, podría haber otras personas "en la estructura" que habrían podido colaborar.

Galán emplazó al juicio que se celebre por esta causa para conocer nuevos datos e insistió en que el "99% de los delitos de sangre que se cometen son resueltos".

ASALTOS EN ESTANCOS Tanto él como Pereira insistieron en que "no está habiendo más hechos delictivos en la región", que es una de las comunidades "con menor incidencia delictiva".

Por otra parte, los agentes investigan los robos perpetrados de forma consecutiva la noche del viernes con un coche de alta gama en un estanco de San Fernando y una tienda de máquinas expendedoras de San Roque, así como una tentativa en otro estanco de Santa Marina. El vehículo utilizado por los ladrones, un Audi 3, ha sido localizado en Portugal. Según Galán, los autores son de fuera de la región, posiblemente de Madrid, y dejaron el reposacabeza y el volante completamente impregnado de barro con el fin de borrar todas las huellas.