Tres porteros de la discoteca Oasis, situada en la carretera de Olivenza, han sido detenidos por la Policía Nacional después de que el pasado sábado causasen graves lesiones a un joven marroquí de 23 años en la puerta del establecimiento. Además de otros daños, a la víctima le fracturaron una pierna.
Según la información facilitada por el Cuerpo Nacional de Policía, no es la primera vez que se produce una agresión de este tipo en este mismo lugar, pues entre el 23 de julio y el 16 de agosto han sido denunciados hechos similares en la comisaría en seis ocasiones. Por este motivo, el delegado del Gobierno en funciones, Inocencio Ramos, descartó ayer en declaraciones a la Cadena SER que se tratase de un caso de violencia xenófoba, dado que se han producido otras agresiones en este mismo local de ocio y la ocurrida el sábado "entra dentro de la normalidad", dijo.
La Policía Nacional se presentó el sábado en la puerta de la discoteca tras recibir una llamada a las tres de la mañana que avisaba de una reyerta. Cuando los agentes llegaron comprobaron que había un joven tirado en el suelo, junto a la puerta del establecimiento y pidieron una ambulancia, que trasladó al herido al hospital Infanta Cristina.
Tras las primeras gestiones se hizo cargo de la investigación el grupo primero de la Brigada Provincial de la Policía Judicial, que ha imputado el hecho a tres porteros de esta discoteca, todos de nacionalidad portuguesa. Se trata de F. M. A., de 18 años, R. D. G., de 24, y H. S. M. R., de 28 años. La policía no descarta que puedan existir otras personas implicadas. Estas tres personas han sido detenidas como presuntas autoras de un delito de lesiones graves y han sido puestas a disposición judicial.
Al mismo tiempo fue detenido el encargado del establecimiento, identificado con las iniciales M. A. M. V., como presunto autor de un delito contra el derecho de los trabajadores, pero fue puesto en libertad tras ser oído en declaración.
