La Diputación de Badajoz ha instalado ya cajeros automáticos en 25 pequeñas poblaciones pacenses dentro del Plan de Lucha Contra la Exclusión Financiera. De ellos, 16 ya están operativos y los otros 9 comenzarán a funcionar la próxima semana.
Tras el cierre de decenas de oficinas bancarias por la crisis, la Diputación de Badajoz apostó por dotar a una treintena de pueblos de este servicio de cajeros automáticos como medida para contribuir también a luchar contra la despoblación. Caja Rural de Extremadura ha sido la encargada de llevar a cabo este plan con un contrato de más de 2,8 millones de euros durante 5 años.
La institución provincial corre con el gasto de la instalación, el alquiler del cajero y el mantenimiento de estos puntos, mientras que los ayuntamientos ponen a disposición el espacio para su ubicación, algunos en casas de cultura y otros en el propio consistorio.
Acedera, Barbaño, Fuente del Arco, Valverde de Burguillos, Atalaya, La Lapa, Hinojosa, Valle de Matamoros, Torremayor, Cristina, Magacela, Gargáligas, Reina, Trasierra, Higuera de Llerena y Malcocinado son los pueblos donde los cajeros ya están en funcionamiento. Mientras que el 16 de agosto empezarán a prestar servicio los de Helechal, Guadajira, Mengabril, Tamurejo, Capilla, Garlitos, El Risco, Casas de Reina y Villarta de los Montes.
En cuanto al resto de las 29 localidades incluidas en el contrato inicial, en Puebla del Prior finalmente se ha abierto una oficina bancaria, y en Sancti Spiritus, Aljucén y Garbayuela se están solventando los trámites con los ayuntamientos para instalarlos. Durante este tiempo se han incorporado al plan dos nuevas localidades: Baterno y Zarza Capilla, según informó la diputación.
