LA POLICIA Nacional ha detenido a dos jóvenes de 26 y 32 años por un delito continuado de estafa, pues simularon ser trabajadores de empresas instaladoras de gas y realizaron revisiones falsas en varios domicilios. Las edades de las víctimas oscilan entre los 53 y los 87 años y les cobraron entre 180 y 350 euros.