La Consejería de Educación ha adjudicado las obras de reforma en el instituto Nuestra Señora de Bótoa de Badajoz a la empresa Al-Senera Obras y Servicios SLU por importe de 340.198 euros (unos 53.000 euros por debajo del presupuesto base de licitación). El expediente va a pasar a fiscalización y tras la firma del contrato, para lo que se estima el plazo de un mes, la adjudicataria tendrá otro periodo similar para iniciar los trabajos, según explicaron fuentes de este departamento. Una vez formalizado el contrato, los técnicos de obras de la consejería mantendrán una reunión con la dirección del centro, la empresa constructora y la dirección facultativa para abordar la «idoneidad y viabilidad» de ejecutar estas obras sin que alteren lo dispuesto en el plan de contingencia elaborado a causa de la pandemia por el instituto,

Las actuaciones previstas, con la mayor cuantía que se destina a remodelar el centro educativo desde su construcción en 1968, tienen como objetivo mejorar la accesibilidad, las medidas de seguridad, la climatización y la red de saneamiento del instituto, en el que se imparte Formación Profesional (FP) de las familias de Agrarias y Edificación y Obra Civil (cada una con cuatro ciclos) y que cuenta con 230 alumnos matriculados.

Las obras afectarán al edificio principal y a otro de aulas en el que se imparten ciclos de Edificación y Obra Civil. El primero, con forma de U, dos plantas y una superficie de casi 2.000 metros cuadrados, alberga en la parte baja aulas, el área administrativa, la biblioteca y la zona de comedor y cocina, mientras que en la alta se ubica la zona de residencia. La mayor parte del pavimento de esta última, que se encuentra agrietado, por se renovará por completo. Además, se sustituirá la carpintería exterior para evitar pérdidas de calor. También se instalarán ventanas nuevas en el comedor y la cocina.

Asimismo se eliminarán las numerosas barreras arquitectónicas que hay en la residencia de estudiantes y se construirá un aseo adaptado. Para mejorar la accesibilidad en el edificio principal, se instalará un ascensor que comunique sus dos plantas y se habilitarán dos escaleras de emergencia, una en cada ala, para la evacuación de la residencia y la apertura de nuevas de salida en los extremos de la planta baja, ambas intervenciones destinadas a mejorar la seguridad en caso de incendio.

El proyecto, con un plazo de ejecución de seis meses, incluye además la reparación de la red de saneamiento general y la construcción de una nueva fosa séptica. Las obras, que el instituto demandaba desde hace tiempo, se licitaron en diciembre del 2029, pero la crisis sanitaria ha retrasado el procedimiento de adjudicación.