No habrá una línea más de la ESO en el instituto Zurbarán y se habilitará en el Bárbara de Braganza como estaba previsto. Así se lo reafirmó ayer la delegada provincial de Educación, Piedad Álvarez, a los padres que el lunes se concentraron para reivindicar que se dotara de un aula extra al Zurbarán, centro que eligieron como primera opción y del que sus hijos se han quedado fuera en el proceso de escolarización.
A la reunión asistieron siete padres, el director y la jefa de estudios del Zurbarán --que defienden que en el instituto hay espacio para una línea más--, el director del Bárbara de Braganza y el inspector provincial de Educación. Según los padres, los argumentos esgrimidos por Álvarez no les convencen y estudiarán qué medidas llevar a cabo para tratar de que su demanda sea atendida. Han pedido reuniones con el secretario general de Educación y el presidente de la Junta.
Por su parte, la delegada provincial aseguró que algunos de los padres, tras ser informados, se habían quedado «más tranquilos» e incluso preguntaron si existiría la posibilidad de que amigos de sus hijos admitidos en el Zurbarán se cambiaran al Bárbara. Álvarez insistió en que la planificación se ha hecho pensando en el interés general.
