Remato la semana hablando de la polémica de las últimos días en Badajoz: los problemas de los vecinos con los ruidos. Desarrollar una sociedad cada vez más civilizada y democrática implica una serie de cambios, no sólo jurídicos o legislativos, sino también en nuestro comportamiento. Afortunadamente, cada vez somos más civilizados. Lo que hace unos años nos parecía normal y soportable, ahora nos escandaliza.

Es el caso, por ejemplo, del polémico Toro de la Vega, ahora llamado Toro de la Peña después de prohibir el linchamiento al que miles de personas sometían a un toro. Una auténtica salvajada. Y ¡ojo! que no estoy hablando de festejos taurinos, sino de la sensibilidad hacia el maltrato animal del que cada vez somos más conscientes. Pues igual sucede con los vecinos que se sienten molestos con el ruido.

Hace unos años protestar o llamar a la policía porque había ruido en la calle, fuera la hora que fuera, parecía hasta ridículo. Y si no que se lo pregunten a los que vivían por encima de la famosa discoteca 29-92, en la plaza de los Alféreces, por poner un ejemplo. Ahora existe hasta jurisprudencia al respecto.

El problema surge cuando el derecho al descanso de los vecinos choca con la necesaria apuesta, en este caso en Badajoz, por recuperar su Casco Antiguo. Los bares y restaurantes que se han instalado en la zona, como las fiestas que hasta allí lleva el Ayuntamiento, han contribuido a esa recuperación. Incluso, muchos de los vecinos que ahora protestan por los ruidos decidieron vivir allí gracias al entorno de "normalidad" que le dieron a la zona esos mismos locales que ahora les molestan, o las miles de personas que transitan por la parte más antigua de la ciudad con motivo de la Noche en Blanco, los Palomos o Almossasa.

Por tanto, si queremos seguir disfrutando del Casco Antiguo de Badajoz habrá que buscar el equilibrio, pero por ambas partes. No sólo los vecinos que deciden vivir allí tienen que dormir. También deben conciliar el sueño los empresarios que han hecho una inversión por abrir sus negocios en la zona.