La Escuela de Restauración de Badajoz (ERB) ha impartido ocho cursos de cocina básica a 460 profesionales y organizado nueve quincenas gastronómicas en sus dos años de existencia, pues la ERB cumplirá el próximo día 29 su segundo aniversario. "Dos años de duro trabajo y dificultades", según el consejero delegado, Antonio García Salas, pero "también de gran ilusión y satisfacción", pues aún recuerda cuando "muchos nos tacharon de locos e ilusos por lo ambicioso y complejo del proyecto, su ubicación en el Casco Antiguo y las pretensiones de hacer algo diferente en una ciudad que, decían, no era receptiva a las innovaciones".

Antonio García manifestó que "sabíamos que las cosas no iban a ser fáciles, pero sin estos elementos el proyecto perdía su sentido", en relación a su ubicación en centro histórico de la ciudad y su carácter innovador. Con todo, los promotores se propusieron como cinco objetivos, como aportar su grano de arena a la revitalización del Casco Antiguo de Badajoz, "y algo hemos conseguido participando en actuaciones colectivas de dinamización de la zona y habiendo servido más de 30.000 comidas en estos dos años".

También se propusieron "dar una oferta gastronómica diferencial, innovadora y amplia, con buena relación calidad-precio", con tres espacios: bar-cafetería y los restaurantes Atalaya, con cocina contemporánea, y el Alpendiz, "de cocina regional".

Otros objetivos fueron "dar el máximo de calidad en el servicio y la comodidad del cliente, con una decoración innovadora"; ser un lugar de encuentro y cultura gastronómica, para lo cual han celebrado nueve quincenas gastronómicas, 16 catas de vino, 14 actos gastronómicos, 8 cursos de cocina básica, en los que han participado 460 profesionales; y promocionar la gastronomía y el turismo de Badajoz, para lo cual ha participado en encuentros celebrados en numerosas ciudades españolas, siendo reconocida la escuela en guías como las de Gourmetour, Campsa y numerosas publicaciones especializadas.