Ese es el espíritu, una murga con el pulso acelerado

Origen

La murga Ese es el espíritu --también conocida como Los 4e-- echa a andar en 2004, y participa por primera vez en el concurso de murgas del Carnaval de Badajoz en 2005. Es fruto de la unión de dos pandillas de amigos enlazadas por compartir espacios e intereses comunes. Son grupos de jóvenes que estudian en el instituto Zurbarán, y hablan de carnaval en el recreo, y chavales que se reúnen, fuera del instituto, en los columpios que había en lo que hoy es la plaza de Conquistadores. Las dos pandillas se fusionan con el objetivo común de poner en marcha un grupo, y el resultado es la murga Ese es el espíritu. El nombre nace en una conversación en la que varios miembros del grupo charlan acerca de la denominación a utilizar para dar a conocer el grupo. La idea parte de Dani y es aceptada por los demás miembros del grupo, que asumen el nombre como propio rápidamente. El alias Los 4e nace de un dibujo que hace Pablo Fariña para el proyecto del primer año, de 2005.

Trayectoria

Ese año --el 2005-- debutan en el López de Ayala, y lo hacen disfrazados de mimos. Inicialmente, habían empezado a trabajar en un proyecto diseñado para ir de gárgolas, pero comprueban que es inviable y comienzan a construir un nuevo proyecto, partiendo de cero, con la figura del mimo como eje. Y así salen a las tablas, de mimos, pero no de mimos refinados, sino de mimos de la calle que actúan en el parque de Castelar para conseguir algo de dinero con el que poder subsistir. El proyecto se trabaja y pone en escena con mucha ilusión. De aquel año queda en el recuerdo una rumba en la que le cantaban a Badajoz y un relato musical, al son de grupos como Marea o El Canto del Loco, que cuenta los primeros pasos de la murga. El año 2006 van de ranas, pero las aguas no transcurren apaciblemente sino más bien turbulentas, porque confluyen en el grupo dos conceptos de murga, que se traducen en dos maneras de crear, de plantear y de alumbrar el proyecto, en estilos distintos y de difícil maridaje. El grupo sale, pero no se percibe la ilusión y unión del primer año. Aún así, hacen una actuación muy digna, de la que se recuerdan pasodobles dedicados a los hermanos mayores y a Antonio (un joven, amigo de alguno de los componentes de la murga, que falleció víctima de un cáncer). Ese verano, el grupo se escinde y, tanto la mayoría de los que se van (para fundar una nueva murga acorde a su idea del carnaval), como los que se quedan (para seguir con Ese es el espíritu), continúan con proyectos con los que se sienten identificados, proyectos que les permiten crear desde la línea estilística en la que más cómodos y a gusto se encuentran. En 2007 vuelve a hacerse presente ese espíritu que dio origen a la murga en 2005. Los seis componentes del grupo que se quedan completan el grupo con amigos enamorados del carnaval que, en años anteriores, no habían podido salir con el grupo por diversas razones. Presentan un proyecto en el que van de hombres de las cavernas. Querían algo rudo en lo musical, y el tipo que eligen va que ni pintado para ello. El cambio de estilo de la murga se palpa en los primeros acordes, pues ya imprimen a toda su actuación esa velocidad endiablada que caracteriza a Los 4e, y que les permite lanzar más cantidad de mensajes en menos tiempo. El decorado de ese año --obra de Juan Umberto, 'Juber'-- es una cueva, con recovecos de los que salen volando murciélagos, brota el agua, etc. Cantan pasodobles en los que se manifiestan contra la Refinería y la explotación animal. En 2008 van de portal de Belén, y empapan su actuación con música de villancicos. Interpretan a las figuras que pueblan los portalitos de Belén que se colocan en los hogares durante las fechas navideñas. Llevan una peana con un molde para colocar los pies, y se desplazan arrastrando el molde por el escenario. Utilizan un pasodoble para hacer reflexionar acerca de las diferencias entre los juguetes y juegos que entretienen a los niños de 2008 y aquellos otros con los que las generaciones anteriores se divertían. Otro de sus pasodobles se lo dedican a las instituciones de la Iglesia, también utilizando un tono crítico. En 2009 van de rancheros y presentan una actuación plagada de ritmos norteamericanos. Disfrutan mucho en la calle, y hacen disfrutar al público con sus ocurrencias, como cuando montaron un rodeo en el que todo el mundo podía participar, montando a lomos de un palo con cabeza de caballo, para conseguir un plato del jamón que Monteporrino les había regalado (junto con otros manjares ibéricos) por mencionar la marca durante su actuación en el López de Ayala. En 2010 van de orquesta. Se presentan bien caracterizados, e interpretan distintos papeles dentro de la orquesta: un músico bajito que toca el bajo, unas coristas muy poco femeninas, un músico ciego, etc. 2011 es el año de la 'Guerrilla THC', que pretende que nadie se quede sin vivir el carnaval y combate a los enemigos de la fiesta. Planifican la actuación en tres partes (una por cada fase), pero la última, en la que iban a secuestrar para su actuación a tres figuras históricas del carnaval (Carlos Ruperto, Paco 'El Cerillo' y el 'Membri') no llega a las tablas, para desgracia de la afición carnavalera, que lo habría pasado en grande. Su popurrí está lleno de chistes, y apenas da tiempo de dejar de reír con uno, cuando ya dan ganas de reír con otro. En 2012 presentan un decorado espectacular, que simula el escritorio de un PC con el sistema operativo Windows. Cada uno de ellos es un icono del sistema. Y la actuación es una sesión de Windows, desde que se enciende el ordenador hasta que se apaga. Todo la actuación sigue un hilo que le da continuidad en este sentido. Y logran un quinto puesto con una actuación muy pulida en lo musical y en lo visual. Finalmente, el carnaval pasado, se presentan ataviados como bichos, con su proyecto 'Los que se cuelan por la ventana'. Y aparecen con unos trajes tremendamente coloridos, una actuación plagada de chistes, muy rítmica y de una teatralidad descacharrante.