El folclore no pasa de moda y sige presente, ahora incluso con mayor auge, entre las nuevas generaciones, como así se puso de manifiesto ayer en el teatro López de Ayala de Badajoz, donde se desarrolló del Festival de Folclore en la Escuela, que cumplió 36 ediciones ininterrumpidas, según confirmó Teresa Macho, coordinadora del festival, que organiza la Asociación de Coros y Danzas de Badajoz.

Al escenario subieron alrededor de 300 niños con edades entre dos años y medio y 14 años, pertenecientes a 19 grupos, entre ellos los procedentes de colegios de Badajoz, como Nuestra Señora del Carmen, de la Soledad y Oscus, también el grupo Infantil de Coros y Danzas de Valverde de Leganés, la asociación La Estrella de Los Santos de Maimona y de la Escuela de Música y Danzas Populares de Badajoz. Asimismo actuaron en el descanso los alumnos de Iniciación de Guitarra de esta escuela. Cada grupo bailó dos o tres danzas, los mayores las menos conocidas, del norte de Cáceres, y los más pequeños las más famosas, como el Ave María o Los Piquitos, que son las primeras que se enseñan en los centros. Ayer además celebraban el Día Internacional de la Danza (29 de abril) y leyeron el manifiesto que se escuchó en todo el mundo, pues la asociación pacense es socia del Consejo Internacional de la Danza, que está en París.

Macho confirmó que se está recuperando la Semana de Extremadura en los colegios de la región, como una forma «muy bonita» para dar a conocer el folclore de esta tierra. La Escuela de Música y Danzas Populares de Badajoz tiene alrededor de 150 niños. La mayoría empiezan a asistir por empeño de los padres, comienzan jugando con los monitores y así van introduciéndose.