Un joven de 27 años, cuyo nombre responde a las iniciales J. L. C., falleció ayer por la tarde ahogado en la charca conocida como Los Pollos, situada en la carretera del Rincón de Caya, un lugar frecuentado por pescadores y en el que se encontraba con un grupo de amigos.
Al parecer, en el lugar había colocado un palé con unas cuerdas desde las que se tiraban al río para bañarse, cuando J. L. C., se tiró y desapareció en el agua.
Entonces se dio aviso a la policía local. Sobre las 18,43 horas el Centro de Urgencias y Emergencias 112 recibió una llamada de la Policía Local de Badajoz, en la que alertaba de la desaparición del joven en la charca.
Cuando los bomberos llegaron al lugar, dos de los amigos del fallecido lo buscaban en el agua, al mismo tiempo que el equipo de buzos de los bomberos se adentraba en la charca. Uno de los amigos que participaba en la búsqueda localizó en el agua el cuerpo sin vida de J. L. C.
ZONA DE PESCA El lugar se llenó de gente que acudió a ver lo que pasaba, por lo que la policía local se vió obligada a cortar el tráfico en la zona del siniestro, que no parece un lugar para pasar un día de campo, ya que está habilitado para la pesca, con unos pesquiles de dos por un metro de ancho.
El cadáver fue levantado sobre las nueve de la noche y en el lugar se vivieron momentos de tensión y nerviosismo por parte de los amigos y familiares del joven, que la emprendieron con algunos profesionales de los medios de comunicación que se encontraban allí. La autopsia desvelará las causas que provocaron la muerte, ya que la policía no quiso avanzar ninguna hipótesis.
