La Junta de Gobierno Local aprobó ayer un gasto de 5.190 euros para contratar vigilancia privada para el recinto ferial, con el fin de evitar los sucesivos robos y daños que se se vienen causando en las casetas, y por los que se detuvieron a tres personas, según el portavoz municipal, José Antonio Monago, quien reconoció que el ayuntamiento no puso luz de forma permanente en el ferial y por eso los empresarios de las casetas no han podido instalar alarmas u otros sistemas de seguridad.

Se ha previsto evaluar la próxima semana con los propietarios los daños y analizar el contenido del contrato para ver si ha habido incumplimiento por parte del ayuntamiento y decidir de qué forma se pueden paliar las pérdidas, "ya que no se trata de un robo aislado, a algunos le han entrado hasta cinco veces".

Monago recordó que dos de los detenidos causaron daños por valor de 15.000 euros, pero se declararon insolventes y fueron condenados a seis meses de prisión. El tercero está pendiente de juicio.

La solución definitiva vendrá después del verano, cuando se dotará, según anunció, de energía eléctrica el ferial de manera permanente, una actuación que costará 120.000 euros.