Hasta 30.000 personas se sumaron el sábado a la fiesta de los Palomos. Según fuentes de la policía local, la máxima afluencia en la alcazaba se registró sobre las 21.30 horas, con 7.100 asistentes, mientras que en puerta de Palmas había entre 14.000 y 16.000 en torno a las 22.30 horas. Aunque de forma simultánea se llegaron a contabilizar cerca de 24.000 personas en ambos escenarios, fueron muchas más las que a lo largo de día disfrutaron de la celebración en estos dos enclaves. A las dos en punto de la madrugada dejó de sonar la música en la alcazaba y una hora más tarde ya se estaba limpiando el entorno de puerta de Palmas.

«Estamos muy emocionados», aseguró el presidente de la Fundación Triángulo, José María Núñez, al hacer balance de esta octava edición de los Palomos. La coincidencia con la feria de Cáceres, el Orgullo de Torremolinos y otra fiesta de referencia para el colectivo LGTBI en Lisboa, además de la meterología, habían sembrado de «cierta preocupación» a los organizadores en cuanto a la afluencia del público este año. No obstante, se demostró que la cita de Badajoz está consolidada y la respuesta a la convocatoria volvió a ser multitudinaria.

No obstante, aunque valoró la masiva asistencia, Núñez recalcó que lo más importante es el significado de esta fiesta «porque refuerza la visibilidad del colectivo LGTBI y ha servido a mucha gente para dar un paso personal en sus vidas», destacó.

Núñez reconoció que a Triángulo le gustaría que se fijase en el futuro una fecha estable para Los Palomos, pero entiende que hay que contar con la Junta y el ayuntamiento para tomar una decisión definitiva. Lo que sí tiene claro es que debe ser el primer o el segundo sábado de junio (en este segundo caso no coincidiría con fiestas similares).

También es consciente la organización de que para ofrecer una propuesta que siga atrayendo a personas de fuera de Badajoz y de la región sería imprescindible que aumentase la financiación pública. Triángulo ya lo ha pedido en repetidas ocasiones a la Junta y al ayuntamiento, aunque de momento la aportación se mantiene. «Estamos agradecidos, pero es verdad que existe una limitación presupuestaria», dijo Núñez, quien recordó que hay otros festivales que con la cuarta parte de afluencia cuentan con hasta «dos, tres y cuatro veces más fondos». En este sentido, aseguró que están buscando patrocinadores privados para poder mejorar la propuesta y que Los Palomos no se agote por falta de presupuesto.

El presidente de Fundación Triángulo resaltó que este «éxito» es fruto del esfuerzo realizado por todas las personas que trabajan en la organización de esta fiesta y agradeció especialmente su labor al coordinador, Hugo Alonso, y a los voluntarios, cuya labor «es impagable».

Pese a la multitudinaria celebración, no se registraron incidentes graves durante la jornada, salvo media decena de agresiones, en las que los implicados sufrieron contusiones. Uno de ellos fue un menor de 15 años, que recibió un golpe en la cabeza con una botella en puerta de Palmas sobre la 1.30 horas, y otro, un hombre de 64 años que presentaba una posible fractura tras ser agredido sobre la misma hora en la plaza de España. Éste último fue derivado al hospital.

Cruz Roja realizó 55 asistencias, la mayoría de ellas (19) por heridas accidentales. También se atendieron ocho casos de intoxicación etílica, entre ellos el de una menor de 12 años, que fue asistida en el puesto sanitario de puerta de Palmas y cuyos padres la recogieron tras ser avisados. Otra persona tuvo que recibir asistencia por intoxicación de drogas.

El jefe de la policía local, Rubén Muñoz, quiso transmitir a través de este medio su felicitación a todos los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y voluntarios que participaron en el dispositivo especial.