De 4 a 10 años son las penas que solicita el fiscal al tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Badajoz, para los diez acusados de cometer delitos contra la salud pública, en el juicio que está previsto que se celebre esta mañana. Los letrados de la defensa, por su parte, plantean la libre absolución de sus representados, según ha confirmado a este diario el abogado Alfredo Pereira.

Los hechos que se juzgan hoy se produjeron entre agosto del 2006 y junio del 2007, según el escrito de acusación del fiscal, quien considera que un grupo de jerarquía difusa se dedicaba a introducir sustancias estupefacientes en el mercado clandestino, en Badajoz.

Señala el fiscal que el 6 de noviembre del 2006, un dispositivo policial que detiene a una mujer y dos hombres a los que se ocupó 114,7 gramos de cocaína, un vehículos y otros efectos. Y se efectúa un registro en un domicilio de la calle vivienda de la mujer, donde vive un cuarto inculpado, con diversos objetos utilizados para la manipulación de estupefacientes, dinero y 637,2 gramos de cocaína.

En diciembre de ese mismo año, se detuvo en un domicilio de la calle Virgen de Guadalupe, tras su registro, a una mujer y a un hermano, así como a un consumidor habitual, encontrando dinero y 144 gramos de cocaína, además de dos turismo y otros efectos.

También se registró, en junio, una vivienda de la carretera de Guareña a Manchita, donde se detuvo a dos varones con dinero, 8,2 gramos de hachís y cocaína; y una más en la calle Miguel de Unamuno, donde se detuvo a una mujer y a su hijo, con dinero, móviles y 114,5 gramos de cocaína.