El juicio seguido contra cuatro personas acusadas de un delito contra la salud pública --los varones R. M. S., C. S. D., y el agente de la Guardia Civil L. M. G. R., y la mujer M. A. P. C.,-- un año después de su detención en una operación antidroga de la Guardia Civil, quedó visto para sentencia.

La vista concluyó tras la exposición de los informes respectivos de las partes, una vez terminadas las declaraciones de los peritos y de los testigos propuestos por el fiscal, por la mañana.

El juicio, iniciado el pasado viernes, se retomó a las 9.45 horas de ayer hasta cerca de las dos de la tarde, para reunirse de nuevo la sala por la tarde para la lectura de conclusiones.

El fiscal modificó sus conclusiones provisionales y redujo su solicitud de pena para los cuatro inculpados de 5 a 3 años de prisión por el delito contra la salud pública. Asimismo, mantuvo las acusaciones de revelación de secreto y omisión del deber de percibir un delito contra el guardia civil, cuya pena consiste en 15 meses de inhabilitación especial, que conllevaría su separación del cuerpo. Las defensas, por su parte, solicitaron la absolución o, de forma alternativa, 18 meses de prisión como máximo.