Son tiempos de timos y estafas, no solo pero también, y al parecer, por lo común de las noticias sobre hechos de este tipo, a los autores no les resulta especialmente difícil encontrar un puñado de víctimas propiciatorias --que puede ser casi cualquiera--, normalmente personas confiadas que no hacen ascos a beneficiarse de algún chollo o alguna comodidad, que por lo común acaban pagando un sobreprecio. Un ejemplo: un individuo que se hace pasar por mecánico de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y ha llegado a emitir tarjetas incluso con el sello legal, a 50 euros la unidad.

El hecho se ha conocido cuando la Guardia Civil ha logrado destapar la comisión de varias estafas continuadas, consistente en la falsificación de certificados de las inspecciones periódicas de la ITV, y ha detenido al supuesto autor, identificado como D. M., P. R., de 27 años, acusado también de falsedad documental.

La investigación se puso en marcha cuando la Guardia Civil de Tráfico detectó irregularidades en una serie de tarjetas de ITV de varios vecinos de Badajoz, que al ser introducidas en la base de datos constaba como que no habían pasado la inspección, y en cambio sí tenían las pegatinas y los sellos acreditativos, según explicó ayer la Oficina de Comunicación de este cuerpo.

Los agentes constataron el uso fraudulento del sello plasmado en las tarjetas, al comprobar que el mismo sello había sido sustraído de una unidad itinerante cuando se hallaba en Azuaga, en mayo pasado, junto con un ordenador portátil, un monitor y varios teléfonos móviles.

El ahora detenido ofrecía a terceras personas pasarles las inspecciones in situ de la ITV, desplazándose a los domicilios de los propietarios. Al no contar con los equipos técnicos necesarios, su inspección se basaba en elementos básicos, como comprobación de luces, intermitencia, líquidos limpiaparabrisas y observación superficial de neumáticos. Después firmaba y estampaba el sello robado en la tarjeta y entregaba la pegatina que debían adherir al vehículo. El servicio costaba 50 euros.

El fallo estaba en que no entregaba el informe de la inspección y el recibo del pago de tasas, que se debe conservar para mostrarlo en caso de ser requerida por la Guardia Civil de Tráfico. De este modo se han detectado tres casos, todos vecinos de Badajoz y pedanías.

El detenido ha pasado a disposición judicial con las diligencias, que siguen abiertas por si se detecta algún caso más.

La Guardia Civil recuerda que según Real Decreto 2042/1994, por el que se regula la ITV, el ultimo informe de inspección debe conservarse y "exhibirlo a requerimiento de los agentes de la vigilancia del trafico que lo soliciten".