La Policía Local de Badajoz, la Policía Nacional, un equipo sanitario del 112 y varias dotaciones de bomberos se movilizaron ayer en el puente de la Universidad y en las zonas colindantes tras arrojarse un hombre al río algo pasadas las doce y media del mediodía. El tráfico en el puente quedó ralentizado durante algún tiempo, y las sonidos de las sirenas, al igual que la numerosa presencia de profesionales sanitarios y de las fuerzas de seguridad, pusieron en alerta a varios vecinos de la zona, que contemplaban conmovidos la escena.

Según ha podido saber este diario, el hombre se precipitó al cauce por el carril derecho en dirección a la margen derecha, y la corriente le arrastró unos metros río abajo, donde una lancha con buzos rescató el cuerpo sobre las 13.00 horas. Ante la mirada de decenas de curiosos, la policía tuvo que acordonar la entrada por tierra del embarcadero, muy cercana a una zona de recreo donde, como cada domingo, se agolpaban las familias y disfrutaban del buen tiempo que respiró ayer la ciudad.

La lancha transportó al hombre al embarcadero, donde esperaban tres coches de diversos cuerpos de seguridad, además de una ambulancia medicalizada y varios profesionales sanitarios, que le practicaron maniobras de reanimación durante más de quince minutos, aunque finalmente no pudieron hacer nada para salvarle la vida. Finalmente, y transcurrida algo más de una hora desde el inicio del suceso, la situación volvió a la normalidad en la margen derecha.