El gerente del Area de Salud de Badajoz, Martín Caballero Gómez, de 48 años, fue encontrado muerto la mañana de ayer por uno de sus hijos. Al ver éstos que no se levantaba, fueron a avisarle y lo hallaron inconsciente. Llamaron a unos vecinos y al 112, pero cuando llegó el equipo médico sólo pudo certificar su muerte, al parecer, de infarto, lo que ha conmocionado al mundo de la sanidad, a familiares y amigos. Su esposa murió en julio.

El cuerpo fue trasladado al Hospital Infanta Cristina, donde se le practicó la autopsia para comprobar la causa de la muerte y, según el consejero de Sanidad, Guillermo Fernández Vara, que estaba muy afectado, una vez concluida, se le trasladaría a Córdoba, donde viven su padre, hermanas y demás familiares, para celebrar el funeral y enterrarlo.

La noticia corrió de inmediato por la ciudad. Ocupaba su puesto desde enero del 2002 y antes era responsable de la Unidad de Andrología del Infanta Cristina y, como dijo Fernández Vara, "había dejado incluso su consulta para dedicarse a la gestión de la sanidad pública".

Martín Caballero tiene tres hijos de 12, 16 y 18 años. La Junta de Extremadura hizo pública una nota en la que "lamenta profundamente esta pérdida" y anunció que el próximo 5 de febrero, a las 19.30 horas, celebrará una misa funeral en su memoria en la iglesia de Santa Teresa, en Badajoz.

Fernández Vara destacó su labor en el área pacense, "estamos orgullosos de haber trabajado con él, por su trayectoria profesional y por lo buena gente que era". Y añadió que "era una pieza clave en el engranaje, un modelo a seguir por llevar el área más grande, que supone el 25% de la población de la región".