El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Badajoz optó ayer por guardar silencio y no contestar a las manifestaciones vertidas el día anterior por la Consejera de Cultura, Leonor Flores, quien defendió que la víctima del derribo del "cubo" de Biblioteconomía es la Junta y que la culpa es del ayuntamiento por haber concedido una licencia de obras "mal dada".

Sí habló el portavoz del grupo municipal socialista, Celestino Vegas, quien dijo que "no es el momento de buscar culpables sino soluciones" porque sea el ayuntamiento el que pague el derribo o sea la Junta, "el dinero es público y es el ciudadano el que va a perder".