La Junta de Extremadura decide denegar la segregación a la entidad local Guadiana del Caudillo porque su nombre es contrario a la Ley de Memoria Histórica.
Sin embargo y según recoge la agencia Europa Press, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, anuncia que el expediente no se ha cerrado a la espera del cambio de denominación.
El consejo de gobierno de la Junta ha aprobado un decreto mediante el cual se deniega la segregación solicitada invocando la Ley 52/2007 de 26 de diciembre, por la que "se establecen medidas en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la dictadura".
"El motivo de la denegación es que la denominación propuesta para el nuevo municipio es contraria a lo dispuesto" por la norma.
La Junta, no obstante, precisa que "se conserva la validez de las actuaciones practicadas en la tramitación del expediente", de modo que "la corrección del motivo de rechazo permita la reanudación del mismo sin necesidad" de repetir los trámites. Lo que significa , que se retomará el expediente y se aceptará la segregación si Guadiana del Caudillo acepta modificar su denominación eliminando la mención 'del Caudillo', de nombre que se ajuste a la Ley de Memoria Histórica.
Guadiana del Caudillo es una entidad dependiente del municipio de Badajoz que había solicitado su segregación para convertirse en municipio independiente.
El alcalde de esta entidad menor, Antonio Pozo (PP), lleva desde este pasado lunes viviendo en una butaca de playa frente a la sede de la Presidencia de la Junta para exigir que en el consejo de gobierno de este viernes se aprobase la segregación de la entidad local.
Este regidor se negaba a cambiar el nombre porque se trata de una cuestión que, a su juicio, debería plantearse como consulta popular, autorizada por el Gobierno, una vez que la localidad se convirtiera en municipio de pleno derecho.
