Un año y medio de prisión es la pena a la que ha sido condenado el guardia civil L. M. G. R. por un delito contra la salud pública, concretado en tráfico de drogas, al tiempo que resulta absuelto de las acusaciones de revelación de secreto y de omisión del deber de percibir un delito, de las que había sido objeto por parte del fiscal, según fuentes jurídicas consultadas por reste diario.

La sentencia, que se dará a conocer hoy, absuelve a los otros tres acusados del mismo delito por el que fueron juzgados, los cuatro, entre los pasados 8 y 13 de junio en la Audiencia Provincial de Badajoz. En él, el fiscal solicitaba 3 años de prisión para cada uno, después de rebajar su petición inicial, que eran 5 años, si bien para el guardia civil solicitaba además 15 meses de inhabilitación especial por los otros dos delitos.

En la vista oral, el letrado Eugenio Barahona, defensor de la única mujer acusada, había reclamado su absolución en todo momento, por no haber participado en los hechos. También las defensas de los otros dos procesados. No obstante, el defensor del guardia, José Duarte, solicitó en último extremo como alternativa, en caso de condena, una pena de 18 meses por el delito de drogas, exclusivamente.

FALTA DE MOTIVACION Fue el letrado Alfredo Pereira quien planteó desde el inicio la nulidad de unas segundas escuchas solicitadas por la Guardia Civil --las primeras fueron por una investigación interna--, que consideró irregulares y que el juez, dijo, no motivó en su auto. Además, señaló que dicho auto no indicaba la ampliación de la investigación a los delitos contra la salud pública. Y ahora ha visto refrendada su petición por el tribunal, que considera las escuchas nulas, así como los registros derivados de las mismas.