La Guardia Civil continúa con sus investigaciones sobre las posibles causas del accidente de autocar, y ayer trabajaba con varias líneas abiertas, sin que haya podido establecer una que indique claramente por qué el conductor perdió el control y el autobús cayó.

Las líneas de trabajo se mantienen en tres direcciones: que se produjera una avería mecánica, que hubiera un error humano e incluso una combinación de ambas, según manifestaron fuentes de la investigación, pero no se puede establecer nada aún, "pues hay muchos intereses y nos faltan datos".

El resultado de la investigación se remitirá al Juzgado de Instrucción número 4, que lleva la causa.