Los vecinos del portal 2 de un edificio de la calle Ricardo Carapeto Burgos, en la barriada pacense de Suerte de Saavedra, alertaron a la policía el pasado día 26 de abril de que una de las viviendas de la primera planta desprendía un intenso olor y hacía días que no veían a Manolo, de unos 50 años, el inquilino que la habitaba. Acudió una patrulla y tras llamar a la puerta, al no obtener respuesta, avisó a los bomberos y procedieron a abrirla con una maza.
Los agentes comprobaron que en el interior se hallaba el cadáver del hombre, que fue reconocido por los vecinos, y que la casa desprendía un intenso olor debido al estado de descomposición del cuerpo, así como a que "guardaba en él residuos que recogía en la calle", explicó ayer a este diario una de las vecinas que avisaron a la policía.
Los agentes avisaron al juez y al forense. "Dijeron que llevaba muerto desde el día 10 al menos, unos 15 días; ordenaron el levantamiento del cadáver y se lo llevó un furgón", manifestó una vecina. La jefatura superior confirmó ayer el suceso, así como que no se detectó ningún signo de violencia y que el hombre falleció por causas naturales.
Los vecinos, que ante el olor de la casa y la ausencia de Manolo "intuimos lo que podía haber ocurrido", se quejan ahora porque el intenso olor de la casa se mantiene y "nadie ha venido a limpiarla, ni los familiares, ni nadie de Fomento, que es la propietaria".
