Agentes de la Policía Nacional, tras recibir el aviso de una familia que llevaba varios días sin ver a su hermano, que vivía en el número 18 de la calle Camino Viejo de San Vicente, en Badajoz, acudieron anoche a su domicilio. Al encontrar la puerta cerrada y ver que nadie abría, avisaron a los bomberos, que forzaron la cerradura, permitiendo el acceso al interior, a las 19.55 horas, y hallando el cadáver de un hombre fallecido y con signos de una hemorragia, pero no presentaba signos externos de violencia, según confirmaron fuentes de los bomberos y la Policía Nacional.

Al parecer, el hombre, de 58 años, estaba junto a la cama, con sangre en la boca y llevaba varios fallecido, pues presentaba rigor mortis. La policía avisó al juez y al forense para el levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para practicarle la autopsia y conocer la causa de la muerte.