La Policía Científica y técnicos de Patrimonio investigan el origen de los restos humanos encontrados ayer en un solar, propiedad de la empresa Almonte, de Jesús Alarcón, entre las calles Prim, Abril y Espronceda, y que utiliza la Asociación de Desempleados (Adeba), como párking. El hallazgo sorprendió a quienes supervisaban el movimiento que realizaba una excavadora para allanar el terreno para ampliar el aparcamiento. Eran las once de la mañana.
Los restos salieron a la luz con la primera palada. El presidente de Adeba, José María Morujo, avisó al ayuntamiento y enseguida acudieron el Grupo de Policía Científica, que valló la zona, y una arqueóloga de la Junta. Los testigos comentaron que "había un cráneo entero, pero al caer se ha partido", así como "fémures y dientes". La policía recogió los restos, entre los que había piezas de cerámica, en dos cajas.
Ayer se desconocía aún el origen de los restos humanos, por lo que deberán ser datados y estudiados por los forenses y por especialistas en arqueología. Los agentes y los técnicos escarbaron en una zanja de dos metros por 80 centímetros de ancho.
El jefe de la Policía Científica, Flores Leal, declaró a EL PERIODICO que los restos podrían pertenecer a "dos o tres personas" y que, inicialmente, no iban a realizar ninguna actuación, salvo poner el hallazgo en conocimiento de la autoridad judicial, "porque se desprende que no hay hecho criminal, por lo que, por una cuestión práctica, nos lo llevaremos y estarán a disposición de Patrimonio".
Por su parte, la arqueóloga de la Consejería de Patrimonio, Beatriz Degriño, señaló que van a estudiar los restos aparecidos para "determinar la fecha". Degriño se llevó del lugar dos sobres con fragmentos de cerámica y manifestó que no podía adelantar nada, "porque están muy sucios y tenemos que lavarlos".
