La exposición En diálogo continuo con el muro , que permanecerá en la Diputación de Badajoz hasta el 30 de septiembre, repasa la producción pictórica del pintor emeritense Julián Hernández a través de 28 cuadros que ha seleccionado expresamente el autor para esta muestra en la capital pacense. En sus cuadros, no solo el dibujo y el color son protagonistas, también las texturas que realzan el realismo de lo que se muestra.

En las pinturas de este artista no aparece la figura humana, que tantas veces repitió en la facultad de Bellas Artes y de la que acabó cansándose, sino ventanas, puertas, paredes desconchadas, llamadores, argollas y miradores que simbolizan historias de otros hombres que nunca aparecen, porque siempre se esconden tras ellas.