De origen franco italiano, nacido en Mónaco, especilista en informática que trabajó en el banco HSBC de Ginebra (Suiza), Hervé Falciani desveló a las autoridades francesas datos de más de 130.000 cuentas de potenciales evasores fiscales de todo el mundo, 24.000 de ellos europeos, incluidos españoles, entre otros, datos que las autoridades francesas pusieron en conocimiento de Hacienda en España, donde en 2010 se identificó a 659 nacionales, a la mayoría de los cuales se les notificó, a 558, de los que 306 se acogieron a una amnistía fiscal con trato de favor, al pagar solo un 3%, frente a los tipos vigentes para el resto de ciudadanos. Esa lista lista lleva desde entonces su nombre.

Hervé Falciani, residente en España desde 2013, cuando la justicia se negó a extraditarlo a Suiza, donde está acusado de espionaje, participó ayer en Badajoz en un acto de Podemos, con la cabeza de lista de esta formación por Badajoz, Amparo Botejara, pero antes habló con este diario. Contó sus impresiones sobre cómo se aborda ese problema tanto en España como el resto de Europa, lo que supone la corrupción para cualquier economía y la democracia, y confiesa que actuó sin miedo, que "estoy muy loco. Aprovecho la suerte que he tenido".

--¿Cuál es su situación en el país?

--Testigo protegido; desde el 2013 vivo en España. Cambio, paso de de autonomías a ayuntamientos distintos con proyectos interesantes que no hacen otros países. Hasta ahora eran Hacienda y las fiscalías las que actuaban, pero en España tenemos iniciativas locales para aprovechar la experiencia de de los demás, y es mucho más importante.

--Es obligado. ¿Hay nombres extremeños en la lista Falciani?

-- Yo jamás me encargué de nombres de personas. Mi papel fue con mecanismos, sistemas, en el cómo se manejan esos sistemas y no hago nada con nombres. Lo más importante es entender los mecanismos. Cuando hablo de educación, me refiero a que se explique bien la relación entre economía y corrupción. La economía de un país depende de cómo se actúe frente a la corrupción. Lo primero es conocer los mecanismos, luego hay caras conocidas, pero hay que centrarse en los mecanismos, con o sin caras de famosos.

--¿Cómo es la situación en España?

--Se entregó la documentación a Hacienda; es un tema jurídico que tiene que evolucionar. Del mismo modo que actúan los bancos y las multinacionales en distintos países, la justicia tiene que aprender a actuar de igual modo. Hay que aprovechar la colaboración entre Hacienda y la Fiscalía Anticorrupción, tienen que colaborar más de lo que lo han hecho hasta ahora.

Cuando salió la trama Emperador, de la mafia China, fue más importante el intermediario Marck Pérez que el número de personas; tiene más sentido que miles de causas. Cuando se estudia la banca privada, todo se basa en intermediarios. Los últimos que conocen la gente son los testaferros, pero estos tienen otros testaferros y empresas, como se ve en los papeles de Panamá; HSBC es la primera banca en esos papeles.

--¿Se debe hacer más?

--Comparada con otros países, la Fiscalía Anticorrupción es un instrumento tremendamente eficaz. La colaboración entre Hacienda y la fiscalía a veces tiene que ser de otro modo. No se puede responder de modo general en temas muy teóricos. Ahora, el ejemplo italiano; buscan herramientas para desarrollar análisis de datos; y Francia; herramientas que pueden aprovechar asociaciones como el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) --que ha sacado los papeles de Panamá--. Es interesante que la ciudadanía ayude en temas de análisis de datos, y las empresas públicas y privadas con iniciativas de transparencia y colaboración, pero tiene que hacerse de modo controlado. Google es una empresa con poder porque sabe utilizar la información.

--¿Queda mucho por sacar?

--Además de investigar sobre personas hay otros formas de actuar y continuar en otros países. Cuando un país empieza a interesarse por un modo de operan, otros también quieren ver cómo se hace.

--En qué medida depende la democracia de un mayor o menor grado de corrupción?

--Cuando la democracia es más directa, cada uno puede acudir a pedir cuentas a su ayuntamiento, por ejemplo, llegar a un tipo de leyes como en Suiza, que puede ser un país porque es inmune a la corrupción, aunque se aprovecha de los corruptos de otros países. ¿Por qué solo Podemos apoya leyes de transparencia en los ayuntamientos? ¿Qué nivel de democracia tenemos y queremos? Suiza es inmune a la corrupción, dentro. Yo fui condenado por espionaje y atentar contra los intereses de la nación al dar elementos vitales a otros países.

No me quedo como espectador, sé lo que me importa, ser local antes que global, auténtico. Ese es el sentido. Tenemos que temer lo que no se desarrolle a nivel local. Prefiero aplicar buenas prácticas al análisis. Si ves el cambio en Francia, fue centralizado, con pocas personas; en España, a nivel local y autonómico se aprovechan mejor las buenas prácticas, y eso da ilusión.

--¿Sigue en el partido X?

--Cuando vimos el dinamismo de España, vimos que eso se traduce en más iniciativas. X nace al mismo tiempo que Podemos, con la misma idea: Transformar el espacio público. Es la posibilidad de trabajar en redes. Hoy me encuentro con amigos de Podemos, que tienen iniciativas ciudadanas en ayuntamientos, porque las cosas se cambian desde abajo. Ese es el sentido de la democracia.

--¿Cómo lleva estar en peligro?

--Lo conozco. No se necesita ser yo para identificarlo. He crecido en un país donde se manejan varios tipos de riesgos y lo he manejado del mismo modo, sin miedo. Busco competencia, instituciones que me puedan ayudar.

--Con wikileaks, Manning, Snowden, Falciani, han cambiado el panorama informativo y social ¿Hasta dónde se puede llegar?

--La misma tecnología de la información explica por qué se puede responder de alguna forma al poder. Del mismo modo que Google puede ser más poderosa que estados, un grupo de ciudadanos puede contestar a un poder. El poder siempre ha intentado controlar los medios de comunicación; lo que se escapa a eso ha abierto posibilidades; el cambio siempre viene con iniciativas como Podemos.

--¿Cuánta información nos queda por saber, y qué hacer?

--¿Cuánto tiempo tenemos para aprender? La corrupción es un freno a la economía. El tiempo que tenemos para entender todo eso lo que falta para que se produzca el cambio. Los estados no tenían modo de actuar antes de conocer la naturaleza el problema. AHora hemos pasado varias fases, a conocer el problema y buscar soluciones. Y es solo el principio,