Se han celebrado unas jornadas mediante videoconferencia sobre El hidrógeno como vectorenergético de desarrollo del Sudoeste Ibérico. Promovidas por LOABRE y ADRAL han sido ampliamente respaldadas y seguidas por entidades públicas y privadas de Extremadura y Alentejo, y han estado presentes las principales entidades del hidrógeno de los dos países y dela Unión Europea. Este acto es el inicio de una serie de actividades que llevarán varios meses de reflexión y debates sobre las muchas oportunidades que existen alrededor del hidrógeno y que desde el Sudoeste Ibérico no debemos estar al margen. Hace años que se inició la revolución del hidrógeno, pero ahora parece que ha llegado su momento y quien no se sume puede perder un importante tren para afrontar el futuro descarbonizado. El mismo lunes Repsol y Petronor anunciaban a bombo y platillos la construcción de una planta de producción de hidrógeno verde en el puerto de Bilbao con una inversión de 60 millones de euros y se destacaba desde La Vanguardia con el calificativo del inicio del Corredor del Hidrógeno que naturalmente debería llegar hasta Cataluña. Cito esta importante inversión para que pueda compararse con la planta de hidrógeno que se va a construir en Sines con 5.000 millones de euros de inversión y que está en uno de los puntos estratégicos de nuestro Corredor Sudoeste Ibérico.
El hidrógeno es el elemento químico más abundante de la naturaleza. Se encuentra siempre formando parte de otros elementos, el principal es el agua. Para separarlo hace falta un proceso de electrólisis, mediante el que se aplica una energía que parte se almacene en el hidrógeno. Energía que gran parte vuelve a recuperarse en un proceso inverso. Hoy día la producción de hidrógeno se realiza en su mayoría con energías contaminantes y generadoras de CO2, y por tanto el gran reto es conseguir hidrógeno verde a base de energías renovables y conseguirlo de manera eficiente y rentable. En el Sudoeste Ibérico tenemos en abundancia los principales componentes: Sol, suelo y agua y ya en proyecto uno de las mayores plantas productoras del mundo. Hay retos importantes que resolver, pero esta revolución no debemos perdérnosla y ponernos manos a la obra para aprovecharla desde el principio. Hay que estar atentos a su desarrollo y sus aplicaciones.
