Después de once años abasteciéndose de agua embolsada que les suministraba la empresa concesionaria del servicio de aguas, Aqualia, los vecinos de la pedanía de Alvarado ven cada vez más cerca el momento en que salga de sus grifos agua potable.

El alcalde en funciones, Francisco Javier Fragoso, anunció ayer que el lunes le llegó la comunicación de la empresa estatal Hidroguadiana de que la obra de abastecimiento a esta población está ya terminada.

Sin embargo, en Alvarado los vecinos se encuentran a la espera de que el ayuntamiento o Hidroguadiana les comunique la finalización de esta obra, según el presidente de la asociación de vecinos, Manuel Palacios, quien reconoció que habrá que esperar un periodo de pruebas.

Fragoso aclaró que "en cuanto tengamos los controles de salud pública estaremos en disposición de anunciar a los vecinos que tienen el agua, independientemente de los temas administrativos, porque no podemos generar dudas".

En este sentido explicó que "una cosa es que esté la obra acabada y otra que el agua que sale se pueda consumir" y reconoció que "los primeros interesados en dar el agua somos nosotros".

Según dijo, las instrucciones al Servicio de Aguas están ya dadas para que se realicen las pruebas necesarias de salubridad, "porque el circuito de agua ha estado lleno de agua que no era potable durante mucho tiempo".

Será necesario llenar el depósito, hacer pruebas de carga en el circuito y controles de potabilidad, y una vez esté garantizada la calidad se dará el agua a los vecinos, para que no tengan ningún tipo de problemas con el consumo, según Fragoso, quien pidió paciencia. "Después de todo lo que hemos esperado, no vamos a generar ansiedad por unos días", señaló. Porque, según dijo, "estamos hablando de días".

MUCHO TIEMPO Alvarado, con 300 vecinos, ha estado casi once años pendiente de este proyecto para disponer de agua potable en el grifo, que recibirá desde la estación de bombeo de Talavera de la Real, inaugurada en mayo pasado. Las obras comenzaron finalmente en noviembre del 2009 y tenían que haberse terminado la primavera pasada, pero sufrió retrasos por causa de las lluvias.

Los vecinos han consumido todos estos años agua en bolsas que lleva hasta el pueblo Aqualia. Alvarado es el último nucleo de población del municipio pacense en recibir el agua potable, después de que se construyera la nueva conducción desde Villar del Rey y un anillo perimetral en su entorno.