La Diputación de Badajoz celebró ayer su último pleno del año, en el que se presentó la reorganización del grupo popular, a raíz de la marcha de su anterior portavoz, Francisco Javier Fragoso, y sus sustitución por el ya diputado provincial Jesús Coslado, nombrando a sus representantes para las distintas comisiones y los organismos en los que participa. Con pocos puntos en el orden del día, se aprobaron los convenios de colaboración de la institución y, por urgencia, cuatro asuntos relacionados con el Organismo Autónomo de Recaudación. Al término del pleno, tras un homenaje a los 25 empleados jubilados este años, el presidente de la corporación, Valentín Cortés, afirmó que sigue a la espera del informe de los técnicos sobre el estado del antiguo hospital provincial, señalando de nuevo que hasta que no sea revertido, no iniciará negociaciones sobre su posible uso.