El Hospital Universitario de Badajoz ha abierto la nueva unidad de hospitalización de enfermedades infecciosas y este fin de semana está previsto que acoja a los primeros enfermos de covid-19. Así lo anunció ayer el consejero de Sanidad, José María Vergeles, tras visitar las obras llevadas a cabo en el ala de la octava planta, que se ha sometido a una reforma integral para convertir esta unidad en un «centro de referencia» para el aislamiento de pacientes infecciosos. Ahora se destinará a enfermos de coronavirus, pero está preparada para albergar a cualquier persona aquejada de una infección grave.
En la obra y equipamiento de la nueva unidad se ha invertido más de un millón de euros. Cuenta con 13 habitaciones, algunas con posibilidad de transformarse en dobles, y cuatro de ellas están acondicionadas para pacientes que, además de presentar infecciones, estén inmunodeprimidos (defensas bajas). Toda la planta está domotizada, lo que permite el adaptarla a las necesidades de cada paciente a través del control remoto de la temperatura, la presión y el sistema especial de filtración del aire que se ha instalado en todas las estancias. Además, los cuartos cuentan con un sistema de acceso automático con dos puertas a modo de esclusa -una en la antesala y otra en la habitación propiamente dicha- para garantizar el total aislamiento de los enfermos.
Estas camas de la nueva unidad de hospitalización de enfermedades infecciosas se suman a las habilitadas ayer en el ala este de la séptima planta, a las que ya funcionan en cuatro plantas más desde hace varias semanas, y a la treintena (con posibilidad de ampliación) que hay disponibles en el antiguo pabellón docente de la Facultad de Medicina, que el Servicio Extremeño de Salud (SES) ha acondicionado para este fin. En este último espacio, ayer había una ocupación del 30%, aunque ha llegado a alcanzar el 70% desde que se habilitó.
Vergeles destacó que esto permite contar con un «volumen muy importante de camas» en el complejo hospitalario de Badajoz, donde más que la presión hospitalaria por el ingreso de pacientes de covid agudos, mostró preocupación por los de la UCI, porque si bien las estancias de los primeros están siendo menores que en la primera ola, en el caso de los segundos «siguen siendo tan altas y además con un pronóstico bastante malo», dijo.
El consejero de Sanidad, que compareció junto al gerente del SES, Ceciliano Franco, y la responsable del Área de Salud de Badajoz, Irene Manjón, también visitó el nuevo quirófano especial destinado a pacientes infectados por la covid-19 que se ha creado en la tercera planta. Estas actuaciones entran dentro del plan diseñado para adaptar los hospitales de Badajoz para afrontar epidemias, que también incluían adecuaciones en el Materno Infantil y en el Perpetuo Socorro que, según Vergeles, se están acometiendo en estos momentos. Vergeles se mostró «muy satisfecho» pues, según valoró, se está dotando al sistema sanitario de medios para que «salga mejor que cuando llegó la pandemia, y esto (la nueva unidad de hospitalización de infecciosos» es un ejemplo», aseguró.
Toque de queda adelantado
Por otra parte, preguntado por la solicitud del alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, de que se adelante el toque de queda para los menores de 16 años ante la dificultad de controlar sus reuniones, el consejero señaló que, aunque la idea del alcalde le pueda parecer «positiva», no es posible desde el punto de vista legislativo.
