La Oficina de Igualdad y de Violencia de Género ya tiene su taller en el programa ´Vive el verano´, en el parque de Castelar. Se llama "El Rincón de la Igualdad" y comenzó ayer sus actividades con una notable afluencia de público.

La temática sobre la que versa el taller siempre genera debate, por más que las últimas leyes intenten refrendar la igualdad entre hombres y mujeres. Con esta iniciativa, "el propósito es fomentar la igualdad a través del juego. Es la mejor forma para que aprendan y se diviertan", observa Sara Martínez, técnico de la Oficina de Igualdad.

La ubicación --por el acceso más próximo a Ramón y Cajal-- también puede ser clave para que acuda la gente, como confiesa Roberto Vázquez, que no sabía de su existencia. "Hemos entrado por causalidad y la chica que lo lleva se nos ha ofrecido; nos ha gustado y nos hemos parado por ser el primero que vimos".

La duda que se plantea es si a estas edades el taller puede servir de aprendizaje realmente. Parece que tanto padres como organizadores están de acuerdo en que la iniciativa debe aplicarse cuanto antes para que en el futuro dé sus frutos.

"Nos ha parecido apropiado llevar la igualdad a edades muy tempranas, trabajar cuanto antes con los pequeños", indica Sara Martínez, quien explica los motivos para hacerlo de este modo: "Hay que empezar cuando son muy chicos, porque a los mayores es más difícil cambiarles la mentalidad", puntualiza.

Roberto la secunda: "Mi sobrina ha visto dos o tres dibujos que le han llamado la atención, que son significativos y de los que puede aprender", afirma.

El éxito, tras contrastar las opiniones de los asistentes, está garantizado: Luisa Macías y Rosa García, dos madres que acudieron con sus hijas, se mostraban encantadas con la experiencia "porque desde pequeñitos es cuando hay que empezar a inculcarles esta perspectiva". "Cuanto más temprano se empiece, mejor", conceden ambas.

En el día de ayer el juego que fomentaba la igualdad era el bingo y el próximo jueves el turno le tocará a una oca "gigante, mucho más vistosa que el bingo porque está en el suelo", matiza Sara Martínez.

La metodología consiste en una fórmula práctica: "Intentamos que sea lo más participativa posible, trabajando valores como la igualdad y el respeto", continúa Martínez.

Los técnicos consideran los juegos y dibujos la mejor forma para trasladar a los críos esta manera de entender la vida; y a los padres les grada la idea. "Está muy bien para que los niños y niñas sepan que las papás y mamás deben hacer todo igual". "Ella lo ve en su padre y en mí que compartimos las tareas de la casa", comenta Rosa.

"Me parece bien, es muy práctico para los niños, incluso hay cosas que ella antes no distinguía y con las actividades está aprendiendo", resume Luisa Macías.