La Hermandad de la Soledad llevará la imagen de la Virgen a Sevilla para restaurar los desperfectos que la talla, de mediados del siglo XVII, presenta en el rostro, cuello y manos, según avanzó el hermano mayor, Joaquín Gil, coincidiendo con el traslado, ayer por la tarde, de la patrona desde su ermita a la catedral, donde se celebrará una novena en su honor hasta el próximo día15 de septiembre.
Gil señaló que la hermandad ya se ha puesto en contacto con varias escuelas de imaginería sevillanas, a las que ha enviado un dosier con información sobre la talla y los desperfectos que sufre para que lo estudien. "A la que mayor garantías nos ofrezca de realizar una buena restauración de la imagen, se la encargaremos", apuntó el hermano mayor, quien destacó que entre los talleres con los que han contactado se encuentran los autores de las restauraciones de imágenes como el Gran Poder o la Macarena de Sevilla.
La hermandad reconoció que la imagen de la Soledad está "francamente deteriorada" y tiene desperfectos en ambas manos, en un ojo y en el cuello. No obstante, los hermanos han decidido esperar a después de la novena para restaurar la imagen porque se trata de un trabajo "muy delicado" que puede prolongarse varios meses.
TRASLADO Varios cientos de pacenses se concentraron ayer a las puertas de la ermita de la Soledad para ver salir a la Virgen y seguirla en su recorrido a la catedral por la por las calles Francisco Pizarro, Hernán Cortés, Obispo San Juan de Ribera y plaza de España, que realizó acompañada por la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestro Padre Jesús Resucitado. La imagen regresará a su ermita el 16 de septiembre.
Desde hoy, y hasta el día 15, la novena en honor a la Virgen será a las ocho de la tarde en la catedral (también habrá misas en la ermita a a las nueve de la mañana y a la una de la tarde). El día 10 será la bendición e imposición de medallas a los hermanos y el próximo sábado, día 13, por primera vez, se celebrará un besamanos como tal a la patrona y no a la medalla como se ha venido haciendo hasta ahora. Gil resaltó que este acto, que calificó de "histórico", ha levantado "gran expectación" entre los devotos de la Soledad al tratarse de la primera vez que se podrán besar las manos de la Virgen.
El besamanos comenzará tras la misa de las diez de la mañana y se prolongará "hasta que haya gente", comentó el hermano mayor. Es más, la hermandad no descarta que el besamanos se pueda repetir al día siguiente si es necesario. "Lo importante es que nadie se quede sin besar las manos de la Virgen", insistió.
Los gastos de la restauración de la talla los sufragará la hermandad y, aunque aún no tienen aún presupuesto, los hermanos son conscientes de que se tendrá que desembolsar una cantidad "considerable". Por este motivo, han decidido que durante el acto del besamanos se instale una mesa petitoria para que todos los fieles que lo deseen colaboren en la restauración.
CATEDRAL ABIERTA Desde la Hermandad de la Soledad recordaron que los días que la imagen de la patrona esté en la catedral, el templo permenecerá abierto al público de nueve de la mañana a dos de la tarde y de seis de la tarde a diez de la noche.
