En el pasado mes de julio ha habido menos incendios forestales en el término municipal de Badajoz que en el mismo mes del año pasado, a pesar de las altas temperaturas y la sequedad del ambiente. Fernando Bermejo, jefe del Servicio Municipal Contra Incendios y Salvamentos de Badajoz, ha asegurado a EL PERIODICO que "este año se han producido una tercera parte de los incendios de vegetación que en el 2004, y la mitad que el verano del año anterior". Y la previsión es que en el mes de agosto se mantenga esta tendencia, según afirmó.

Este dato, cuando hay media península en llamas, en España, Portugal y ahora en Francia, y con los incendios que se han producido en la provincia de Cáceres, en julio pasado, no deja de llamar la atención. Sin embargo, tiene una explicación, según Fernando Bermejo.

La razón de que haya menos fuegos de pastos y vegetación es que Badajoz está en que es una zona llana, con muchos cultivos de patos y dehesas poco tupidas, donde no hay bosques ni grandes masas arbóreas, de forma que la sequía ha impedido que haya vegetación abundante y por tanto, cuando se produce el fuego, hay poco combustible para alimentarlo.

CUNETAS Y PARCELAS Durante el pasado mes los bomberos realizaron un total de 220 servicios, de los que 113 fueron para sofocar incendios. De éstos, fueron 79 los que afectaron a pastos y vegetación en el término municipal, y de ellos, 53 se produjeron fuera de la ciudad, en cunetas y parcelas, y 26 en solares y espacios urbanos, según los datos estadísticos que maneja el propio servicio.

Frente a los 79 incendios forestales y de pastos de este mes de julio, el mismo mes del año anterior se produjeron en Badajoz casi el triple de fuegos, 214 en total; y en el anterior, el doble.

Fernando Bermejo resaltó además otro factor que los bomberos suelen tener muy en consideración, y es que de esos 79 siniestros, en 72 de ellos el tiempo de duración de la intervención no llegó a la hora, y el que más tiempo requirió para su extinción, fue uno que no llegó a las tres horas. Este dato, según el jefe del servicio "indica que se trata de incendios de poca monta, de muy escasa consideración, por lo que, en definitiva, está siendo un verano muy tranquilo, y esperemos que siga así".

Las causas, explicó Bermejo, están en que "como no ha llovido, el pasto está muy bajo y se consume enseguida por lo que no hay cumbustible que quemar, y aquí no tenemos arbolado, ni pinos resinosos, ni nada de eso. Cuando hay un fuego, se quema el poco pasto que hay y no da lugar a quemar otra vegetación, no cobra fuerza". Y añadió: "Luego, la temperatura varía, pero esa no es la causa, lo fundamental es la falta de humedad y de lluvias en invierno y primavera".

PERSONAL El Servicio, según Bermejo, en esta época de vacaciones no hay especial carencia de personal, "intentamos que no nos afecte de forma importante, procuramos que las vacaciones no coincidan con otro tipo de descansos". No obstante, "sí hemos tenido algún problema a principios de julio por bajas de enfermedad, pero se ha ido solucionando", manifestó. No hay gran diferencia respecto de otros meses, sólo que hay más trabajo, "pero como este año está siendo benigno en incendios de campo, lo vamos sobrellavando bien".