La aplicación de los nuevos precios del autobús urbano en Badajoz ha cogido de improviso a los usuarios e incluso a los trabajadores de la empresa que gestiona el servicio, Tubasa. El concejal responsable, Alejandro Ramírez del Molino, explicó que ni siquiera el ayuntamiento puede saber qué día empiezan a aplicarse, hasta tanto no se publiquen los precios en el Diario Oficial de Extremadura, una vez que la Comisión regional de Precios adoptó el acuerdo el pasado 29 de diciembre.

El billete ordinario pasa de costar 0,70 euros a 0,75, lo que representa una subida por encima del 7%, si bien Ramírez del Molino destaca que globalmente, todas las tarifas suben una media del 3,8%. Este porcentaje sobrepasa el IPC, pero el concejal dijo que está justificado por la subida de los salarios, el combustible "y poco más".

MAS DEFICIT Sin embargo, desde el grupo Socialista, José Ramón Suárez se mostraba en contra de que sobrepase la inflación, porque además supondrá que este transporte se utilizará menos y se incrementará el déficit, que debe asumir el ayuntamiento, pues el contrato con Tubasa establece que la Administración local garantiza el 40% de ocupación (en el 2001 no llegaba al 25% y la tendencia es que se reduzca). Ramírez del Molino no tenía aún datos de la ocupación del 2003 y del déficit.

Con estas nuevas tarifas, el precio del transporte urbano en Badajoz es el más alto de la región. En Mérida el billete ordinario cuesta 70 céntimos y en Cáceres 60. Sólo en Plasencia vale igual, pero el festivo y el especial es más bajo. Ramírez del Molino justificó que en Badajoz el número de líneas es muy superior y los recorridos más amplios. Además, el concejal apuntó que los precios de Badajoz están en la media de las capitales de provincia del país.