La Unión Temporal de Empresas (UTE) Dragados-Conisa, que inició en octubre la obra de ampliación y reforma del Hospital Infanta Cristina, ha empezado ya a levantar la estructura de hormigón del nuevo edificio que se conectará por la parte de Consultas Externas al edificio actual, que también será reformado en todas sus plantas por esa parte.

Después de varios meses de movimientos de tierra, que han ocasionado molestias a usuarios y trabajadores a causa del ruido y el polvo, "se ha iniciado una fase más silenciosa de la obra", según el subdirector de Obras del Servicio Extremeño de Salud (SES), Luis Foz, quien aseguró que "los plazos se están cumpliendo a rajatabla".

Aunque inicialmente se trabajará solo en la construcción del nuevo edificio, está previsto que sobre el verano se realice ya alguna actuación que tendrá alguna incidencia en Consultas Externas, "que afectarán fundamentalmente a instalaciones e infraestructuras generales, pero no a servicios concretos". La reforma de esta parte no se abordará hasta que no salgan las consultas y los servicios, para lo que se están adecuando espacios en el Perpetuo Socorro y en la L.

Está en fase de contratación la adecuación de consultas en la L, en la primera planta, a donde irán antes de que finalice el año las consultas de Traumatología. Ya se trasladaron a la L los Servicios de Otorrino y de especialidades quirúrgicas de Traumatología, según Luis Foz. Antes del verano está previsto que se traslade el hospital de día, donde se realizan tratamientos oncológicos, de la quinta planta de Consultas Externas del Infanta Cristina a la sexta planta del Perpetuo Socorro, que ahora es un espacio diáfano sin destino. En la obra se invertirá 18 millones.