Un Plan de Dinamización Turística debe servir para potenciar este sector, pero en este aspecto se ha hecho poco. El dinero se ha gastado, más que nada, en propaganda y cartelería. Pero hay que poner en valor la mayor alcazaba de España y el resto de monumentos, además del casco antiguo. Y hacer hincapié en una infraestructura y servicios adecuados, desde la limpieza, a la señalización pasando por más puntos de información, cámping, el olvidado área de descanso y, sobre todo: promoción exterior.