No fue fácil reunir a más de 20 músicos profesionales en un proyecto en los que ellos tenían que invertir su talento, ilusión y sacrificio sin que hubiera contraprestación económica de por medio (más bien al contrario). La pasión por la música y las ganas vencieron al bolsillo y nació Iberian Big Band y su primer espectáculo y producción propia For once in my life , con el que esta noche (21.00 horas) realizan su puesta de largo en los jardines del Museo de Bellas Artes de Badajoz.

Estos cinco saxos, cuatro trompetas, otros tantos trombones, piano, guitarra, contrabajo, batería y percusión a los que se unen las poderosas voces de Gene García y Mili Vizcaíno prometen una velada de jazz, blues y swing con "sonidos potentes, mucha fuerza y que va a sorprender al público", asegura Hugo Díaz (piano). Durante hora y media, sonarán temas al más puro estilo de la era swing como Sing, sing, sing , clásicos como Fly me to the moon o More , además de otros inmortalizadas por Ella Fitzgerald o Duke Ellington.

Esta big band ha reunido a músicos con formación clásica (profesores, exalumnos y alumnos del conservatorio), de jazz, profesionales autodidactas y hasta actores. Y es que no será un concierto al uso. Para su presentación, Iberian Big Band ha confiado el papel de maestro de ceremonias al actor Javier Leoni, que ha creado un personaje que se encargará de introducir a la banda, los temas y a los solistas.

"Queremos hacer una música diferente a la que hacemos, coqueteando con el jazz y el blues", explica Guillermo Galindo (tromba). Esto ha requerido tiempo, estudio y muchos ensayos, porque los temas no se interpretan tal cual marca la partitura original: se han hecho arreglos para darles un sello propio y se han incorporado improvisaciones en los solos.

Iberian Big Band es la única agrupación musical de estas carcaterísticas activa en estos momentos en Badajoz y nace con vocación de consolidarse. For once in my life (por una vez en mi vida) no solo es el nombre del espectáculo y la canción con la que este se cierra, sino que resume el espíritu con el que se han embarcado y comprometido en este proyecto musical.

La actuación de hoy servirá para grabar un video promocional. El siguiente objetivo: el salto a teatros y salas de concierto. "Nos ha costado mucho trabajo y sacrificio poner esto en marcha y quizás lo más difícil está aún por llegar, que es darle continuidad al proyecto, porque sin actuaciones es difícil seguir tocando", reconoce Vicente Contador (saxo). Saben que no son buenos tiempos para casi nada, pero confían en que este primer concierto les abra puertas (y bolsillos).