De la necesidad y el deseo de tener voz propia en la reivindicación de sus derechos nace la Asociación de Jóvenes con Inteligencia Límite, promovida por un grupo de usuarios de Aexpainba, pero que funcionará de manera independiente. El nuevo colectivo acaba de echar a andar con su inscripción en el registro del Instituto Municipal de la Juventud de Extremadura y el nombramiento de la junta directiva, que está compuesta por diez miembros y presidida por Serena Ramos.

Sandra Sánchez, educadora social de Aexpainba, es la persona de apoyo con la que han contado estos jóvenes para gestionar el proceso de constitución de la nueva asociación, pero serán ellos quienes «lleven la voz cantante y decidan los pasos a dar», explica Sánchez. «Quieren que se visibilicen sus necesidades, no quieren ser un colectivo escondido y que se normalice su participación en la sociedad», añade.

Debido a la pandemia, las primeras reuniones, que se desarrollarán dos veces al mes, serán por videollamada, pero la intención es solicitar un espacio en el Centro Joven de Badajoz para que en el futuro este funcione como sede del colectivo.

La asociación nace con un carácter eminentemente reivindicativo, pero también llevará a cabo actividades de ocio, encaminadas sobre todo a favorecer la integración social. A esta asociación pueden pertenecer jóvenes de entre 16 y 31 años, tal como establece la legislación en materia de asociacionismo juvenil.

Precisamente sobre esta cuestión se centra una de sus demandas: quieren que se amplíe la franja de edad hasta los 40, pues en su caso la madurez tarda un poco más en llegar. «Sus necesidades son diferentes y algunos han sido privados de muchas cosas en su juventud», apunta Sandra Sánchez. En Aexpainba, con más de 200 usuarios, unos 150 tienen menos de 31 años.

Además de esta reivindicación, pondrán sobre la mesa otros problemas que les preocupan, como el acceso a la educación y la necesidad de que se inviertan más recursos, la dificultad para incorporarse a un mundo laboral muy competitivo o la lucha LGTBI.

«La creación de la asociación ha sido un boom y ha suscitado mucho interés», reconoce la educadora social. Ahora está dispuestos a trabajar «con ganas e ilusión» para que su autonomía crezca dentro y fuera de Aexpainba.