Una treintena de jóvenes desempleados con dificultades para acceder a la formación son los beneficiarios en Badajoz del programa Renacimiento , promovido por la Consejería de Igualdad y Empleo con el objetivo de aumentar sus posibilidades de inserción en el mercado laboral a través de su cualificación, en este caso, en el campo de la hostelería y la mecánica.

Los 30 alumnos, con una edad media de 21 años, fueron seleccionados entre las más de 300 solicitudes que recibió la convocatoria. Aunque en ediciones anteriores de este mismo programa los beneficiarios procedían fundamentalmente de la zona de Colorines, de donde llegaban el mayor número de solicitudes, este año se han presentado muchos aspirantes de otros barrios, como Suerte de Saavedra, Cerro de Reyes, las Ochocientas o Cerro Gordo.

El proceso formativo, que combina la teoría y la práctica, empezó en octubre y los alumnos están divididos en tres especialidades: mecánica, ayudante de cocina y camarero de piso. Durante los dos primeros meses los alumnos han recibido formación teórica y en estos momentos dividen su tiempo entre las clases y la puesta en práctica de los conocimientos que han adquirido.

Los alumnos de la especialidad de cocina lo hacen en el Centro Hermano, donde se encargan de elaborar el menú que se sirve en la comida. Los que se están formando como camareros de pisos realizan prácticas en la residencia San Javier de Aprosuba, en Las Vaguadas, mientras que los de mecánica las llevan a cabo en el parque móvil de la Diputación de Badajoz.

El paso siguiente será su incorporación a empresas en periodo de prácticas. En ésta y en la primera fase los participantes reciben una beca de 350 euros mensuales, mientras que en la que se desarrolla actualmente perciben, por estar contratados a tiempo completo, el salario mínimo interprofesional.

Sandra González, directora del centro Renacimiento en Badajoz, explicó que este año, aunque se ha suprimido una especialidad del programa, se han mantenido dos ramas de hostelería por ser el sector que mayor oportunidades de trabajo ofrece. La especialidad de mecánica se imparte este año por primera vez.

"Otros años hemos tenido pintura y albañilería, pero tal como está el sector de la construcción, hay que ser realistas y elegir especialidades con las que los alumnos puedan encontrar un empleo", apuntó González.

Desde el 2006, en este programa se han formado a 120 personas y el 25% de ellas encontró un empleo, la mayoría en las empresas donde realizó sus prácticas.

Los alumnos complementan sus conocimientos con formación básica y de materias transversales (educación para la salud, orientación laboral, habilidades socioprofesionales...).