El alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, decía ayer que en lugar de generar polémicas, se mantuvo callado ante «los guantazos» recibidos las últimas semanas por el mal estado que presentaba la avenida Reina Sofía y optó por dirigirse «hace muchos días» a la Dirección General de Infraestructuras de la Junta para que reparase los desperfectos de esta carretera, conocida como Circunvalación. La Junta va a hacerlo y además, cuando acometa las obras de acondicionamiento de los 1,7 kilómetros de esta vía, la titularidad, que ahora es del Gobierno regional, pasará al ayuntamiento, después de que éste compruebe que se encuentra en «posición de revista» y el pleno apruebe el convenio de cesión.

Así lo acordaron ayer el alcalde y el director general de Infraestructuras, José Luis Andrade, en la reunión que mantuvieron en el ayuntamiento. En una nota posterior al encuentro, la Junta explicó que en el Plan de Conservación de Carreteras aprobado para el 2018 se contemplaba la reparación de los desperfectos de esta avenida por importe de 388.449 euros. Independientemente de este arreglo integral, Fragoso reclamó una actuación «de urgencia» en el asfaltado.

En cuanto a la cesión de la titularidad, el alcalde se mostró partidario de asumirla, como ya hizo con la avenida Carolina Coronado y la entrada de la carretera de Cáceres, por tratarse de vías eminentemente urbanas. No así la BA-20, según dijo, que depende del Gobierno central, hasta que no haya una carretera que circunvale la ciudad, en referencia a la Ronda Sur. De esta ronda también hablaron en la reunión de ayer. Fragoso mostró su confianza en que las obras del primer tramo empiecen en unos meses, al tiempo que defendió que el segundo tramo debería ser la conexión con la Plataforma Logística.

Por otro lado, el alcalde trasladó al jefe de servicio de la dirección general la necesidad de acondicionar el tablero del puente Real. «Sería bueno que le echen un vistazo», dijo, pues también es responsabilidad de la Junta.