El autobús urbano de Badajoz es más caro desde ayer, pero no tanto como pretendía el ayuntamiento pacense, porque la Comisión de Precios de la Comunidad Autónoma, dependiente de la Junta de Extremadura, no ha autorizado que este año suban todos los conceptos del transporte público de Badajoz, al menos en la cuantía que pretendía el gobierno municipal.
El caso más flagrante es el del billete ordinario. El ayuntamiento aprobó que pasase a costar de 80 a 85 céntimos, pero la Comisión de Precios no ha permitido el más mínimo incremento y su precio se mantendrá, así como también ha recortado las subidas del bonobús de estudiantes y del mensual, cuyos precios se incrementan pero en menor medida de lo que proponía el consistorio. El bonobús de estudiantes (10 viajes) costará 4 euros, 10 céntimos más que hasta ahora; mientras que el precio de la tarjeta mensual será de 26,40 euros, 90 céntimos más que la anterior.
LAS APROBADAS Otros subidas que afectaban a otro tipo de usuarios y bonificaciones, sí se han admitido (ver cuadro). Así, el bonobús ordinario pasa a costar 20 céntimos más (5,20) y la tarjeta Hora-Valle (10 viajes) costará 3,10 euros, en lugar de 3 euros. Suben asimismo el billete para días festivos, que pasa de 90 a 95 céntimos y el nocturno, que también se incrementa en 5 céntimos, de 80 a 85 céntimos.
De momento, el ayuntamiento no va a recurrir esta decisión, aunque el concejal responsable del servicio, Alejandro Ramírez del Molino, declaró ayer a EL PERIODICO que será una posibilidad que trasladará a la Junta de Gobierno Local.
Esta desautorización de la Junta afectará negativamente a la economía municipal, dado que será dinero que la empresa concesionaria, Tubasa, dejará de percibir y que al final el ayuntamiento tendrá que abonar para cubrir el déficit del servicio, como está comprometido con la empresa. El equipo de gobierno todavía no ha calculado cuánto le supondrá esta decisión a las arcas municipales.
LOS MAS VENDIDOS El formato de viaje que más utilizan los usuarios del transporte urbano en Badajoz es el del bonobús ordinario, cuya subida sí se ha autorizado, pero de los billetes unitarios el ordinario es el que más se expende.
"Lógicamente cuando se propone una subida no es caprichosa, sino necesaria", argumenta el concejal y aduce que en este caso se incrementaba debido a que los precios del gasóleo han crecido mucho, por encima del 4%, además del sueldo de los conductores y del material, que incluso motivaban que el incremento de las tarifas hubiese sido mayor que el propuesto.
Ramírez del Molino no comentó los motivos por los cuales la Junta ha tomado esta determinación, porque según él no hay razones que la justifiquen. Explicó que en la reunión de la Comisión de Precios, que se celebró el pasado 2 de diciembre se justifica la decisión "aunque yo creo que un poco a su manera". El concejal considera que si una Administración realiza estudios económicos para solicitar el incremento de tarifas, cuesta entender, afirma, que "haya personas que a lo mejor no están suficientemente cualificadas y puedan desmontar lo que ha realizado un economista".
